Estudiante de efectos especiales, Guillermo del Toro comienza a sentirse atraído por el cine durante el instituto. Funda su propia productora, Necropia, y en 1985 comienza a producir sus primeros títulos. Su debut como director tiene lugar en 1986 con la serie ‘Hora marcada’, de la que se encargaría de seis episodios.
Se estrena como director de un largometraje en 1993 con ‘Cronos’, de la que también es guionista. A pesar de tratarse de su primer trabajo consigue hacerse con muy buenas críticas. Se consolida como director algunos años más tarde, en 1997, con ‘Mimic’ y posteriormente se atreve con otros títulos como ‘El espinazo del diablo’ (2001), ‘Blade 2’ (2002), ‘Hellboy’ (2004), o ‘El laberinto del fauno’.
Asimismo, Del Toro también desarrolla una prolífica carrera como productor con filmes como ‘El orfanato’, ‘Splice’ o ‘Los ojos de Julia’.