No hacen falta las señaladas fechas de Halloween, siempre apetece una buena maratón de películas de miedo, de todos los estilos y todos los tiempos. Puestos a estar en ese plan, tampoco es mala idea ponerse una miniserie, ahora que se están volviendo realmente populares estos últimos años. Un fenómeno al que ha contribuido una imprescindible como La maldición de Hill House.
Creada y dirigida por Mike Flanagan, el que ahora es conocido como el maestro del terror de Netflix (aunque acabe de firmar su despedida con La caída de la casa Usher), esta adaptación de Shirley Jackson consiguió convertirse en un fenómeno inesperado. Con el tiempo, se ha ido estableciendo como una de las mejores miniseries del género de terror, y confirmó a Flanagan como un autor importante en su generación.
En el verano de 1992, Hugh y Olivia Crain y sus cinco hijos -Steven, Shirley, Theodora (Theo), Luke y Eleanor (Nell)- se mudan a Hill House para renovar la mansión con el fin de venderla y construir su propia casa, diseñada por Olivia. Sin embargo, debido a unas reparaciones inesperadas, tienen que quedarse más tiempo y empiezan a experimentar fenómenos paranormales cada vez más frecuentes.
Las mejores series de Netflix en 2023 según SensaCineTodos estos fenómenos acaban provocando una trágica pérdida y la huida de la familia de la inquietante casa. Veintiséis años más tarde, los hermanos Crain y su distanciado padre se reúnen después de que otra tragedia les golpee, y se ven obligados a enfrentarse a cómo su estancia en Hill House ha afectado a cada uno de ellos.
Después de unos cuantos films de terror que habían destacado entre los fans del género, Flanagan pasó a trabajar por primera vez con Netflix en la película El juego de Gerald. El resultado fue lo bastante convincente para ambas partes para expandir la sociedad con la ansiada adaptación de la clásica novela de fantasmas y mansiones encantadas. Y, para hacerle debida justicia, el director optó por el formato de la miniserie.
'La maldición de Hill House': fantasmas personales
Fue la mejor decisión posible. Cada capítulo se permite explorar con detenimiento a cada personaje, sus traumas y sus fantasmas personales, mostrando el poderoso embrujo de la mansión. Un ejemplo de la riqueza de los guiones de Flanagan, que luego lleva a buen término con una dirección espléndida que ofrece algunos de los mejores episodios de los últimos años, como el sexto, con un increíble (falso) plano secuencia.
La película que lanzó la fulgurante carrera del maestro del terror en Netflix: costó dos duros y recuperó su inversión en su estrenoAlgunos la consideran la mejor versión de Flanagan, tanto en series como en toda su obra. Es difícil negar que la obra completa tiene una fuerza increíble y una frescura que la mantienen como algo especial. Lo importante, no obstante, es que permitió al director dar el salto que llevaba tiempo madurando, y en el proceso reivindicó el arte de hacer miniseries para adaptar clásicos del terror.
Puedes ver La maldición de Hill House en Netflix.
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