El 29 de junio llega a las salas 'Transformers: El lado oscuro de la luna', la tercera entrega de la saga basada en la línea de juguetes que la compañía Hasbro popularizó allá por la década de los ochenta. Para la realización de esta secuela, han vuelto a unir sus fuerzas Michael Bay (como director una vez más) y Steven Spielberg (de nuevo en labores de producción).
En esta ocasión se nos cuenta que la primera expedición que la NASA organizó a la Luna, fue porque se detectó un impacto en ella, y por eso mandaron allí al Apollo XI. Al introducirse los astronautas en el lado oscuro de la luna, las comunicaciones se cortaron debido a que todo lo que allí sucedió era alto secreto. Y es que lo que Neil Amstrong y los suyos vieron era algo que jamás podían imaginar: un vehículo espacial de origen alienígena, que cayó sobre la faz del satélite. Lo que desconocían todos era su cometido: esta nave fue enviada por los Autobots, al ver que su guerra en el planeta Cibertron contra los Decepticons estaba perdida. Ésta sería la única esperanza para esta bondadosa raza alienígena.
Nos trasladamos a la actualidad, Sam Witwicky (Shia LaBeouf) el joven que salvó a la humanidad en dos ocasiones del ataque de los Decepticons se encuentra en paro y vive con su novia Carly (la recién fichada Rosie Huntington-Whiteley), mientras los Autobots, liderados por Optimus Prime, ayudan al Gobierno de la Nación en diversas misiones especiales. Pero algo no anda bien, aunque el malvado Megatron y sus secuaces se retiraron al exilio, la aparición de Shockwave y Soundwave hace a los aliados de los humanos temerse lo peor. Al enterarse de que los Servicios de Inteligencia estadounidenses ocultaban el hallazgo en la cara oculta de la luna, que solo unos pocos conocían, y que éstos y miembros del Programa Espacial ruso comienzan a aparecer, decidirán emprender un viaje a nuestro satélite y resucitar a su centenario líder, que se encuentra confinado en la nave estrellada: Sentinel Prime...
Una secuela revitalizadora
No se puede negar el talento del director de 'La roca', para explotar los gustos del público afín al blockbuster veraniego: explosiones, chicas guapas, argumentos simples y digeribles, y sobre todo el ensalzamiento de los valores humanos fundamentales. Bay ha tomado el toro por los cuernos y ha decidido dejar atrás el pequeño fiasco que supuso la segunda entrega, para dar al público una película con su auténtico sello: cine palomitero cien por cien adrenalítico, y es que esta 'Transformers: El lado oscuro de la luna', no solo supera a esta sucesión de chistes y batallas que era 'La venganza de los caídos', sino que pasa a convertirse en la mejor de toda la franquicia.
La elección de Rosie Huntington-Whiteley para sustituir a la diva Megan Fox, no aporta demasiado a la película, ya que no pasa de ser mujer florero que no se despeina ni se rompe la tapa de sus tacones de vértigo. También repiten Josh Duhamel, Tyrese Gibson, e inexplicablemente volvemos a tener a John Turturro (que sigue sin saber muy bien que hace por allí), y los nuevos fichajes de un tremendamente sobreactuado John Malkovich y una correcta Frances McDormand. Como siempre Shia LaBeouf da la talla tanto en las escenas dramáticas como cuando se le exige acción.
Resumiendo, no ponemos en duda que 'Transformers: El lado oscuro de la luna' sea el éxito del verano, (no tiene demasiada competencia en su categoría, exceptuando 'Green Lantern (Linterna Verde)' y 'Capitán América: El primer vengador') y que deje muy contentos a los seguidores de la franquicia, pero también haga pasar un buen rato a los no tan fans de la ciencia ficción. Aún así las producciones de la saga distan mucho de ser cine comercial de calidad, que aúne un buen guión trabajado y grandes efectos especiales, algo que solo está ahora mismo en las manos de unos pocos, como Christopher Nolan o Duncan Jones.
Tomás Andrés