Divergente, junto a Hermosas criaturas y Cazadores de sombras: Ciudad de hueso, es una de las películas que busca emular el éxito de La saga Crepúsculo. Se estrena en USA el 21 de marzo de 2014 y a España llegará próximamante de la mano de Aurum. El guionista Evan Daugherty (Blancanieves y la leyenda del cazador) ha prometido que será muy diferente al resto de los fenómenos adolescentes y la historia, protagonizada por Shailene Woodley (que hará de Mary Jane Watson en The Amazing Spider-Man 2), narra la historia de Beatrice 'Tris' Prior, una joven que vive en una Chicago distópica. Pero no sólo eso, ya que la sociedad futurista está dividida en 5 facciones que dedican su vida a cultivar una virtud distinta. ¿Cómo son?
Los Sinceros - Virtud: La Verdad. Valoran la honestidad por encima de todas las cosas y siempre dicen verdad sean cuales sean las consecuencias. Pueden ser reconocidos por su traje negro y su corbata blanca, el uniforme estándar de Los Sinceros. Ven la verdad en valores absolutos, de ahí el color de sus ropajes. Con el paso de los años, esta facción ha llenado de confianza a la sociedad y sus líderes trabajan en el campo de la ley. Los niños de este grupo siempre dicen lo que sienten y se someten como iniciados a una prueba que consiste en contestar preguntas muy personales. La teoría es que el iniciado revela todos sus secretos y no tiene ningún deseo de mentir en el futuro.
Los Altruistas - Virtud: La Abnegación. Como su nombre indica, valora el altruismo y el servicio al prójimo por encima de todas las cosas. Siempre van vestidos de color gris, de modo que ninguna de las prendas que llevan llame la atención de los demás. Los miembros de esta facción no celebran los cumpleaños porque piensan que es algo egoísta. Los niños Altruistas comparten sus cosas con los demás y siempre se muestran callados en las clases y las cafeterías. La ciudad distópica de Chicago está gobernada por un consejo de 50 miembros de esta facción que, a menudo, es considerada como aburrida por el resto de los grupos sociales. A Los Altruistas no les está permitido mirarse demasiado en el espejo, comen comida poco sabrosa, como pollo o peras, y son extremadamente religiosos.
Los Valientes - Virtud: La Osadía. Valientes y belicosos, arriesgan su vida si es necesario. Llevan piercings, tatuajes y siempre visten de negro. Su objetivo principal es el de proteger el perímetro que rodea la ciudad. Sus niños son escandalosos e incontrolables. Ríen, gritan y compiten los unos con los otros en distintos juegos. Viven en una caverna. Sus iniciados se someten a un entrenamiento durísimo para convertirse en Valientes de pleno derecho.
Los Pacíficos - Virtud: La Cordialidad. Creen que mantener la paz es lo más importante y por eso intentan que los demás sean pacíficos. Visten siempre con los colores rojo o amarillo y Tris los descibre como amables, cariñosos y despreocupados. Sus niños juegan a las palmas y organizan juegos con canciones. El resto de la sociedad los ve como artistas y, aún así, Chicago tiene muchos Pacíficos en puestos de consejeros y cuidadores.
Los Inteligentes - Virtud: La Erudición. Viven su vida dedicada a cultivar el conocimiento. Los niños de esta facción siempre están leyendo libros y periódicos. Proporciona a la ciudad de Chicago maestros sobresalientes e investigadores. También actúan de documentalistas. Su edificio principal es la biblioteca. Tienen la mirada concentrada y son muy constantes. De acuerdo con sus normas, todos los miembros deben llevar al menos una prenda o accesorio de color azul para que el cuerpo se relaje. Se les da bien escribir y pronunciar discursos.
- Los Sin Facción. Existe un grupo más en la sociedad que no forma parte de ninguna de las 5 facciones arriba mencionadas. Son personas que han fallado sus programas de iniciación y ahora viven en la pobreza haciendo el trabajo que nadie más quiere hacer. Son conserjes, trabajadores de la construcción y barrenderos. Algunos conducen autobuses y otros desempeñan su labor en una fábrica. Como pago, consiguen comida y ropa y viven en mitad de carreteras colapsadas o estaciones de metro abandonadas.
Santiago Gimeno
