La ganadora del Oscar y protagonista de Los juegos del hambre: En llamas Jennifer Lawrence fue presionada para hacer dieta si no quería poner en peligro su carrera. Así lo ha desvelado la actriz a la revista Harper's Bazaar, donde ha comentado que le pusieron la etiqueta de "gorda", y que incluso varios productores intentaron convencerla para que perdiera peso.
"Fue una de esas mierdas que tenemos que aguantar las actrices", explica Jennifer Lawrence en la publicación. "Alguien me dijo que estaba gorda y que me iban a despedir si no conseguía adelgazar [...] Incluso me dieron fotografías en las que estaba casi desnuda y me aconsejaron que las usara como motivación para mi dieta. Pensaron que no me haría daño por el modo en que iba mi carrera en aquellos momentos". Ahora, después de ganar el Oscar por El lado bueno de las cosas, JennLaw confiesa que ha encontrado un modo de protegerse de esa clase de comentarios. "Si alguien me susurra la palabra "dieta", yo respondo "que te jodan".
Menos mal que la actriz que interpreta a Katniss Everdeen no ha hecho caso de las críticas sobre su peso. El próximo 22 de noviembre estrena la esperadísima Los juegos del hambre: En llamas y además tiene una agenda de lo más apretada. Aparecerá en Serena de Susanne Bier, de nuevo junto a Bradley Cooper, y repetirá una vez más con él en American Hustle de David O. Russell, director de El lado bueno de las cosas. También tiene pendiente X-Men: Días del futuro pasado -donde interpreta a la mutante Mística-, y hasta ha rodado un cameo en Dos tontos muy tontos 2. Ahora está en medio del rodaje de Sinsajo Parte 1 y Sinsajo Parte 2, desenlace de Los juegos del hambre, y justo después repetirá con Gary Ross en una nueva adaptación de Al este del Edén de John Steinbeck. Por si fuera poco, Lawrence aparece en todas las revistas y es imágenes de firmas tan conocidas como Dior. Fuera quien fuese quien pensaba que tenía que adelgazar, estaba claro que se equivocaba.
Los juegos del hambre: En llamas
Santiago Gimeno
