La Trilogía del Baztan, tan conocida en las tierras de Navarra, abre sus puertas al mundo cinematográfico, con fecha de estreno en 2017. El guardián invisible es la primera parte de la saga literaria de la autora donostiarra Dolores Redondo, cuya obra será adaptada al cine por Fernando Gónzalez Molina, tras el éxito de su anterior trabajo Palmeras en la nieve, y donde por primera vez renuncia a su actor fetiche, Mario Casas. El rodaje ha comenzado hace tres semanas y su protagonista, Marta Etura, se enfrenta al papel de Amaia Salazar, una inspectora que tiene que resolver el caso de un asesino en serie que mata chicas jóvenes en Elizondo, donde ella pasó su infancia, lo que hará que los viejos fantasmas resurjan.
El futuro de la saga
La obra literaria ha conseguido llegar a más de millón y medio de lectores y ha sido traducida a más de 30 idiomas. Su autora nos cuenta cómo los derechos de la trilogía fueron adquiridos por Peter Nadermann, productor de la saga Millennium, antes incluso de su propia publicación. Nadermann se ha trasladado a Elizondo para ver los escenarios y Redondo ya ha estado presente en una de las secuencias delante de "la misma Amaia Salazar", en referencia a Marta Etura. La novelista confiesa que la intención del proyecto cinematográfico es seguir y que continúe la saga pero "todo va a depender de que le guste al espectador cuando vea la película”. Asimismo, ella ofrecerá un respiro a su célebre personaje con otra nueva novela donde también habrá un crimen, tras la cual regresará a escribir sobre Amaia.
La escritora vasca defiende que la preparación de la Trilogía del Baztan -El guardián invisible, Legado en los huesos y Ofrenda a la tormenta-, le ha llevado un duro camino de investigación desde 2008. “El modo que yo imagino es visual, incluso hay momentos en los que llegaba a representar para hacerme una idea más espacial”. ¿Por qué no se ha atrevido como guionista? Según ella, que ha defendido la tarea de Luiso Berdejo, porque "es una técnica muy diferente" que "requiere conocimientos de cine".
Vocación internacional
Fernando González Molina resume el filme como “una historia a contrarreloj, que cuenta seis días en la vida de una tía desesperada por solucionar un caso”. El director de Palmeras en la nieve ha hablado sobre el miedo inicial que sintió al no coincidir de nuevo con Mario Casas. "Con él había establecido un vínculo de trabajo basado en la confianza. Siempre tirábamos juntos de los proyectos que hacíamos”. Pero el cambio no le ha sentado nada mal con Marta Etura, una actriz "muy comprometida", según sus palabras, y con la que se siente "acompañado" y "sin miedo".
El realizador cuenta que, por sorpresa, El guardián invisible acabó en sus manos en un aeropuerto y en pocas semanas ya se había leído los tres libros. Al final, un golpe de suerte ha hecho que el proyecto que él anhelaba acabara en sus manos. Su intención consiste en crear "un thiller internacional que viaje" y, que al mismo tiempo, esté arraigado en las tierras navarras. “No sabíamos qué iba a suceder con la película pero, viendo las primeras imágenes, sí que tengo la sensación de que se entenderá y de que se disfrutará en cualquier parte del mundo".
Sin miedo al proyecto
La ganadora del Goya por Celda 211 Marta Etura da vida a la protagonista del filme. “Estoy apasionada con este proyecto". Eso sí, ante las posibles críticas, la actriz se explica: "Es muy difícil alcanzar el nivel imaginario de la gente; cada uno se habrá imaginado a Amaia de una manera y yo creo que al final da igual si es rubia, si es morena, si es alta, si es baja... Lo importante es ser fiel a la historia, porque es lo que contamos”. Además, no está ansiosa por futuras entregas y cree que es mejor vivir el día a día.
Actriz y director hablan sobre la similitud "temática" entre el filme con el largometraje de Jonathan Demme El silencio de los corderos . “Un thiller profundamente emocional, que tiene una carga de personajes muy bestia. En la que el conflicto del personaje protagonista tiene tanta potencia como el caso. Ambas confluyen en la historia principal, la personal y la criminal”, razona González Molina.
El conocido actor teatral, cómico y monologuista Juan Carlos Librado 'Nene' asume por último el papel de Jonan, el segundo de Salazar, en su primer papel en el cine, y con un profundo cambio de registro. "Me preocupaba que la gente aceptara el físico de Jonan que había imaginado leyendo las novelas pero, después de que Dolores me haya dicho que estaba encantada, estoy tranquilo a la hora de afrontarlo”. El actor también alaba la “conexión total” con Marta Etura y, pese a esta nueva aventura, destaca que nunca abandonará la 'standard comedy': "Me encanta y me apasiona. No voy a dejar de hacerlo jamás. Es un medio que me deja expresar lo que yo quiero, del que puedo vivir y encima hago reír a la gente”.