'NCIS' trató de ocultar el mal rollo entre sus protagonistas con un montaje a medida que el equipo nunca confirmó

La salida de Pauley Perrette del reparto de NCIS, emitida en España tras el título NAVY: Investigación Criminal, no estuvo precisamente exenta de polémica en su día, pero la que fuera la controversia más sonada del procedimental americano nunca pudo aclararse del todo, ni siquiera varios años después. Perrette interpretaba en la serie a uno de los personajes más queridos, la científica forense Abby Sciuto, por lo que su marcha en 2018 se hizo notar muchísimo entre los fans que, desde entonces, no han dejado de soñar con su regreso.

Unos meses después de anunciar su salida en 2017, la actriz publicó un hilo en Twitter con acusaciones graves de lo que había experimentado en el set. Según Perrette, había sido físicamente asaltada en el set de rodaje y, aunque no había contado públicamente lo que pasó, estaba harta de leer mentiras: "Me niego a hundirme, por eso nunca he contado públicamente lo que pasó. Hay noticias por ahí que cuentan mentiras sobre mí.

"Es horrible. Me fui. Múltiples asaltos físicos", escribió sin mencionar a nadie, pero visiblemente cansada de habladurías que, en su opinión, no mostraban la realidad: "Siento que tengo que proteger a mi equipo, los trabajos y mucha gente, pero, ¿a qué precio? [...] Hay una "máquina" manteniéndome en silencio y alimenta historias FALSAS sobre mí. Una "máquina" publicitaria muy rica, muy poderosa".

Un tiempo después, ya en 2019, Perrette puso nombres y apellidos a su agresor al señalar a su compañero Mark Harmon, encargado de interpretar al personaje principal de la serie, Leroy Gibbs: "No, no voy a volver nunca. Por favor, parad de preguntar", sentenciaba la actriz en redes sociales, "Estoy aterrorizada de que Harmon y él me ataquen. Tengo pesadillas con ello".

"Hace un año, Pauley vino con un problema de trabajo. Nos tomamos el asunto de manera muy seria y trabajamos con ella para encontrar una solución", declaró la cadena CBS a Variety tras las primeras palabras de Perrette.

Así, antes de que Pauley Perrette anunciase que se marchaba, ya había mal rollo en el set de rodaje y se mantuvo durante unos meses. Sin embargo, los espectadores no debían ser conscientes de ello y se hizo un gran esfuerzo para lograrlo.

Pauley Perrette y Mark Harmon filmaron sus escenas por separado

No se sabe exactamente qué sucedió en el set de NCIS entre Perrette y Harmon. Sin embargo, está claro que hubo al menos una disputa seria entre las dos estrellas. CBS, que transmitió la serie en Estados Unidos, intentó mantener una imagen de paz y tranquilidad para el mundo exterior.

Según publicó The Wrap, para ello se llevo a cabo un apaño: hacer que Harmon y Perrette no estuvieran en el mismo lugar, según una fuente de la publicación: "Ella filmó sus escenas un día, él filmó otro". Un arreglo que también se habría aplicado a escenas en las que Abby y el personaje de Mark Harmon, Gibbs, aparecían juntos, puesto que, al fin al cabo, ambos personajes tienen una estrecha relación.

¿Cómo lo hicieron? Mediante un montaje inteligente del material filmado por separado, ensamblando los planos de las escenas compartidas. La CBS nunca confirmó el montaje especial señalado por The Wrap. Un trabajo de edición extra que se prolongó durante la temporada 15 en su totalidad y que se "solucionó" con la salida oficial de Perrette.

Asimismo, The Wrap también arrojó luz sobre la razón del conflicto: Según la publicación, un día Mark Harmon llevó a su perro al trabajo y allí mordió a un miembro del equipo al que tuvieron que darle 15 puntos, pero, a pesar de lo sucedido, siguió llevándolo, lo que habría indignado a Perrette. Las quejas de la actriz hicieron que a Harmon se le prohibiese llevar a su perro y eso inició la brecha entre ambos.