Dicen que nunca hay que hacer una película con niños o animales, pero Hollywood se olvida muchísimas veces de esta norma no escrita. Hay ocasiones en que un pequeño bebé o un perro entrañable es justo lo que necesita una película para conectar con el público y no son ni uno ni dos los directores que aseguran que no han tenido ningún problema al trabajar con niños. Por lo tanto, es posible que el problema esté en otra parte.
En cualquier caso, nos alegramos enormemente de que haya productores que decidan ir a contracorriente y contratar jóvenes actores en papeles destacables. Gracias a ellos encontramos varios casos en películas míticas en los que siempre es divertido pensar: ¿cómo estarán ahora, décadas después de su salto a la gran pantalla?
Es lo que ocurre con el niño tan adorable y, a la vez, tan puñetero de El peque se va de marcha. Este bebé se lo puso muy complicado a los secuestradores que se hicieron con él. Hay momentos en los que un bebé nervioso puede ser desquiciante, pero justo aquí es lo que necesitaba la trama. Si le encanta explorar, mejor hacerlo de tal manera que ponga de los nervios a aquellos que quieren hacerle daño.
Otro niño de película que seguro que recuerdas es el de Cariño, he agrandado al niño. En la cinta, Rick Moranis vuelve a dar vida a Wayne Szalinski, el profesor que la lía un poco tras reducir a sus hijos. En la secuela, el problema es todo lo contrario. Szalinski convierte a su niño en un gigante de varios metros de altura. Una saga muy recordada a la que siempre merece la pena volver.
Y, del mismo modo, cómo olvidar al genial Pubert, el nuevo hijo de la familia Addams al que conocemos en La tradición continúa. Gomez y Morticia no tienen suficiente con Miércoles y Pugsley y dan la bienvenida a su peculiar hogar a un nuevo miembro. Su llegada revuelve un poco las cosas y genera todo tipo de problemas con sus hermanos. Por mucho que intenten matar al pobre Pubert, éste siempre sale ileso.
Puedes echar un vistazo a cómo han crecido los bebés más famosos de las películas a continuación.