Rodada en más de 23 países, esta película documental trata la crisis de los refugiados en todo el mundo. La insuficiente ayuda, soporte y apoyo para más de 65 millones de personas que han tenido que abandonar sus hogares en busca de una nueva vida, que no saben cuándo ni dónde comenzará. El director Ai Weiwei (Ai Weiwei: Never sorry) muestra en este filme la desbordante situación actual a través de los testimonios recogidos a lo largo del documental. La cámara está presente en los campos de refugiados de los diferentes países afectados y también en el foco del conflicto.