El creador de El juego del calamar, Hwang Dog-hyuk, la escribió hace 10 años. Sin embargo, fue rechazada por actores y compañías durante esos 10 años hasta que Netflix se hizo con los derechos.
El número que se usa en la serie se trataba de uno real. La única diferencia es que en corea se trata de 10 números y en la serie aparecen ocho. Sin embargo, los teléfonos de corea añaden automáticamente el prefijo 010, por lo que mucha gente empezó a llamar al propietario de este número más de cuatro mil veces al día. Netflix finalmente cambió el número posteriormente.
En tan solo 28 días desde su estreno, la serie consiguió ser vista por 111 millones de usuarios, superando a Los Bridgerton como la serie original de Netflix más vista.
La muñeca del primer juego, ‘luz verde, luz roja’, existe en la vida real, concretamente en un pequeño pueblo de Corea del Sur llamado Jincheon Country. Su papel es el de ser la guardiana de un museo de carruajes de caballos llamada Macha Land.