Estudiante de Arte Dramático, las dotes interpretativas de la actriz británica destacan desde muy temprana edad. Tras pequeños papeles en televisión y en películas de bajo presupuesto, en 2005 debuta en la gran pantalla con un papel protagonista en ‘My Summer of Love’ en 2005. Su interpretación en esta película le vale un billete a Hollywood y en 2006 consigue su primer papel importante en ‘El diablo viste de Prada’ junto a Anne Hathaway y Meryl Streep.
Gracias a este papel su carrera se pone en marcha y el año 2007 se convierte en un gran año que le permite protagonizar numerosos filmes como ‘Wind Child’, ‘Conociendo a Jane Austen’, ‘Como la vida misma’ o ‘La guerra de Charlie Wilson’.
La versatilidad a la hora de interpretar papeles la hacen cada vez más visible antes los ojos de la crítica y en los siguientes años continúa su prolífica carrera con títulos como ‘Sunshine Cleaning’ (2008), ‘El hombre lobo’ (2010) o ‘Destino oculto’ (2011).