Nacido en Zúrich, se trasladó y creció en la pequeña ciudad del Eiffel alemán Mayen, para trasladarse a Roma a principios de los años 60, porque no quería quedarse estancado en el papel del malvado. En ese momento ya había rodado más de una docena de películas en Alemania. En Italia Adorf también triunfó y se convirtió en una estrella, poniéndose ante la cámara para directores como Damiano Damiani, Sergio Corbucci o Dario Argento.
Desde mediados de los 80 Adorf se convirtió con sus interpretaciones de reparto en una estrella de televisión ("Via Mala", "Der große Bellheim", "Der Schattenmann", "Heimatmuseum"), lo cual alternaba con apariciones en series de televisión italianas ("Princesa Fantaghiró"). En 1985 los directores alemanes de televisión y cine le concedieron el "Zapato-Chaplin". Recibió la "Cinta de Cine en Oro" por su propietario de restaurante italiano. En 1994 completó un programa en solitario como cantante en "Al Dente" (también publicado en disco). Desde 1992 Adorf viene publicando libros de relatos y memorias.