Adam Sandler debutó como actor en el teatro al mismo tiempo que era estudiante de arte en la Universidad de Nueva York. En su último año consiguió un pequeño papel en algunos episodios de 'La hora de Bill Cosby'. A principios de los años 90 fue descubierto por Dennis Miller, actuando en un pequeño club en Los Ángeles, así se convirtió en una de las estrellas del Saturday Night Live, junto a Mike Myers y Chris Rock. Tuvo un par de papeles secundarios, hasta que tuvo su gran oportunidad en el cine con 'Cabezas huecas '.
En 1998, con 'El chico ideal', el actor se muestra al público internacional. Con este éxito, el actor continúa encadenando victorias en taquilla con las comedias 'El aguador', 'Un papá genial' o 'Little Nicky', estableciéndose como uno de los cómicos más populares en el extranjero, especializado en el humor de trazo grueso.
En 2003, Adam Sandler revela un aspecto más serio, en 'Punch-Drunk Love' de Paul Thomas Anderson. Se reencuentra con el director Frank Coraci, siete años después de su colaboración para rodar la comedia 'Click'. También se embarca en un papel de un bombero que finge ser gay, junto a Kevin James en 'Os declaro marido y marido'.
En 2008, el actor, también muy activo en la producción, vuelve a la comedia absurda, con 'Zohan' donde toma el papel de un agente de élite que sueña con convertirse en peluquero. El mismo año actuó en la película de Disney 'Más allá de los sueños'. Adicto a la comedia, toma uno de los roles principales en 'Hazme reír' de Judd Apatow, donde se encuentra con Seth Rogen y Eric Bana.
Posteriormente escribió y protagonizó 'Niños grandes' y ha tenido otro éxito más con la comedia romántica 'Sígueme el rollo' junto a Jennifer Aniston.