Will Smith estaba destinado a desarrollar su carrera en la música cuando, en 1989, conoció a Benny Medina, productor ejecutivo de Warner, quién le dio el papel principal en la serie de televisión 'El Príncipe de Bel-Air'. Una serie que le proporciona gran popularidad y le permite iniciar una carrera en el cine. En 1992, protagonizó la comedia 'Made in America'.
En 1995, Will Smith explota a nivel internacional con su papel de policía imprudente y seductor en el éxito de taquilla 'Dos policías rebeldes'. Al año siguiente, confirmó su ascenso meteórico en la superproducción 'Independence Day'. Sobre la base de su talento para la comedia, el actor aparece en las divertidas 'Men in black' y 'Wild Wild West'. Pero también demuestra que es capaz de papeles más complicados como demuestra con su presencia en el drama 'La leyenda de Bagger Vance' (2001).
Después de su sorprendente composición del boxeador Muhammad Ali en 2002, se reencontró con dos sus personajes favoritos de Agente J en 'Hombres de Negro 2' y Mike Lowrey en 'Dos policías rebeldes 2'. Actor de gran demanda en Hollywood, se hizo con el papel de detective en la futurista, 'Yo, Robot', que adaptaba una obra de Isaac Asimov.
Al año siguiente, rueda la comedia dramática de Gabriele Muccino, 'En busca de la felicidad', que le permite rodar junto a su pequeño hijo Jaden Smith. Más tarde se enfrentaría a una horda de zombies sedientos de sangre en la adaptación libre de la novela de culto de Richard Matheson, 'Soy leyenda'. Will Smith encarna a continuación al superhéroe 'Hancock', antes de regresar en 2008 junto al director Gabriele Muccino, en 'Siete almas'.