Después de una infancia problemática en Irlanda, Jonathan Rhys-Meyer fue descubierto a la edad de 16 años con un papel en una nueva versión de 'La guerra de los botones'. Posteriormente consiguió un pequeño papel en 'Un hombre sin importancia' (1994) junto a Albert Finney. Su carrera continuó en 1996, cuando fue descubierto por el director Neil Jordan, que le elige para encarnar al asesino de Liam Neeson en 'Michael Collins'.
A continuación, encadena películas muy diferentes: 'Lazos de muerte', 'El final de la inocencia' o 'Titus'. Su aclamada interpretación de una estrella de rock en 'Velvet Goldmine' le permite elegir sus películas con mayor libertad. El actor repite gran éxito en Gran Bretaña y en el resto del mundo con 'Match Point' Woody de Allen.
Aunque trabaja junto a Tom Cruise en la exitosa película 'Misión: Imposible III', él es más conocido por sus más éxitos en la televisión. Interpreta a Elvis Presley en una película de televisión que le valió un Globo de Oro. Luego se consagraría con la serie 'Los Tudor', donde su interpretación del rey Enrique VIII es notable. El joven actor sin embargo, no olvida la gran pantalla y se ofrece en 2010 a coprotagonizar la película de acción de 'Desde París con amor' junto a John Travolta.