Mamoru Hosoda nació en 1967 en Toyama (Japón). Tras licenciarse en la Universidad de Bellas Artes de Kanazawa, se incorporó al estudio Toei como animador en 1991. Comenzó a trabajar en la serie de culto Dragon Ball Z, trabajando con el director Shigeyasu Yamauchi. En 1999, dirigió su primera película, Digimon Adventure, que se estrenó en los cines.
En 2004, el realizador japonés estuvo a punto de dirigir El castillo ambulante para Studio Ghibli antes de renunciar por diferencias artísticas. Fue entonces cuando decidió adaptar un guión de Satoko Okudera, y de esta manera estrenó en 2006 La chica que saltaba a través del tiempo: una película que superó todas las expectativas y permaneció en la cartelera japonesa durante un año.
En 2009 dirigió su primera obra cien por cien de autor: Summer Wars y después llegarían las aclamadas El niño y la bestia (2015) y Mirai, mi hermana pequeña (2018).
Con la creación de su estudio, se convirtió en la punta de lanza de una nueva ola de jóvenes directores que se están independizando de los grandes estudios japoneses como Ghibli o Toei. En la actualidad es uno de los realizadores deanimación más reputados a nivel internacional.