Es uno de los productores habituales de Sam Raimi desde la película Premonición, a la que siguieron las entregas de la famosa Spider-Man, cuya primera parte recaudó 114,8 millones de dólares en el fin de semana de su estreno. La segunda obtuvo la mayor recaudación de la historia realizada en un día, y la tercera superó a la primera con una taquilla de 151,1 millones de dólares durante los tres primeros días.