Fue presidente de Universal Pictures antes de fundar Casey Silver Productions en octubre de 1999. Empezó trabajando como guionista. Después de ser el ayudante de dirección de Adrian Lyne en Flashdance, se convirtió en director de desarrollo y producción de Simpson-Bruckheimer Productions, donde se ocupó del desarrollo del primer Superdetective en Hollywood. Antes de unirse a Universal, fue vicepresidente de producción de TriStar Pictures.