Acaba de llegar a Max el debut en el terror de una directora con mucho legado cinematográfico

Quizá el comienzo de otra trayectoria legendaria

No siempre los debuts son los mejores trabajos para sacar conclusiones sobre cómo irá una carrera en el cine. Incluso contando con la ventaja de tener familia en la industria, que te permita conocer antes de tiempo cómo funciona un rodaje desde dentro, poder hacer una obra notable requiere de mucho aprendizaje además de talento, que igual puede asomar en esa primera obra.

Se podría decir que algo asoma en Los vigilantes, una obra de terror folk protagonizada por Dakota Fanning que ha sido el debut en formato largometraje de Ishana Night Shyamalan, hija de M. Night Shyamalan. Uno de los estrenos de género destacados del año que hace su llegada al streaming a tráves de la plataforma Max.

Mina, una americana que vive en Irlanda, trabaja en una tienda de animales y está luchando por superar la muerte de su madre a causa de un accidente que provocó de niña, distanciándose de su hermana gemela en el proceso. Su jefe le encarga la entrega de un valioso pájaro, al que llama Darwin. Mina se adentra en un inmenso bosque y su coche sufre una avería que la deja atrapada en él.

Cuando regresa, descubre que el coche ha desaparecido. Más tarde se encuentra con una anciana que la observa. Tras oír ruidos inhumanos en el bosque, sigue a la anciana, Madeline, hasta un edificio parecido a un búnker. Al entrar en el búnker, Mina conoce a los otros dos ocupantes del mismo, Ciara y Daniel. Madeline les explica que un misterioso grupo llamado "Los Vigilantes" observa al grupo todas las noches a través de los cristales de espejo del gallinero.

'Los vigilantes': atmósfera y bosque

Lo que más destaca de una película como Los vigilantes es el énfasis en la atmósfera inquietante y boscosa, además de ir manejando el suspense. Por supuesto, comparte con su padre el interés por ir manejando giros de guion a lo largo del relato que pillen desprevenido al espectador, y muestra decisiones interesantes en lo visual y la puesta en escena.

No se puede decir que salga bien parada de todos sus giros narrativos, de cómo establece las normas en este universo o en cómo elabora los personajes. Ahí se muestra que estamos todavía ante una cineasta que está empezando, pero igual le sucede como a su padre y necesita un par de películas para demostrar que tiene nivel.

Puedes ver Los vigilantes en Max.

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