Eli Wallach interpretó el papel de su vida en 'El bueno, el feo y el malo' de Sergio Leone. Un personaje de culto que debe mucho a las brillantes improvisaciones del actor
¿Realmente necesitamos presentarles al Tuco Benedicto Pacífico Juan María Ramírez, alias "Tuco" para los íntimos, sin duda uno de los personajes más cultos del Séptimo Arte? Habiendo entrado en la leyenda con su loca encarnación del Feo mexicano aliándose con Blondin contra Setenza en El bueno, el feo y el malo, todo es absolutamente de culto en el personaje brillantemente interpretado por Eli Wallach. Empezando por supuesto por sus líneas, conocidas como la palma de su mano por los aficionados de todo el mundo.
“¿Un western italiano? ¡Y por qué no una pizza hawaiana!”
Sergio Leone había adorado al actor en su interpretación del forajido Charlie Grant en The West Won en 1962; y, quizás aún más, su interpretación del líder de los bandidos mexicanos Calvera en Los siete mercenarios de John Sturges.
"Mi agente me llamó a Los Ángeles para decirme: 'hay un director italiano que ha visto tus películas sobre Occidente y los bandidos y le gustaría conocerte para una película'", le dijo el actor al historiador del cine Christopher Frayling. gran especialista en westerns transalpinos “Dije: ¿qué tipo de película? - Un western italiano... - Nunca había oído hablar del western italiano. ¿Qué tal una pizza hawaiana?
De todos modos, conocí a Sergio, que no hablaba ni una palabra de inglés. Me dijo en francés: "Me gustaría que actuaras en mi película. Te la mostraré. ¿Quieres ver un fragmento de ella?" Y cuando vi lo que hicieron con su nombre en los créditos de Y por unos dólares más, me dije: "este tipo tiene sentido del humor".
Wallach toma Tuco
Cuando supo lo que iba a hacer, Eli Wallach le pidió a Henry Hathaway, con quien había hecho dos películas, que eligiera el sombrero de paja que usaría Tuco durante toda la película, pero también sus rodilleras de cuero, usadas en México para protegerse. de los arbustos. El cineasta está encantado de ver lo ansioso que está Wallach por hacerse cargo de su personaje.
"Una de las cosas que más me gustó de él fue que estaba dispuesto a correr riesgos, a dejarme hacer lo que quisiera con el personaje de Tuco. "¿Te importaría si usara tirantes? - ¡No, claro, haz lo que sientas!”
Tomando su palabra, Wallach multiplica las improvisaciones y los brillantes descubrimientos para retratar a su inolvidable sinvergüenza. Por ejemplo la forma en que Tuco hace la señal de la cruz, muy rápidamente. “¡Pensé que sería divertido hacerlo dos o tres veces seguidas!” A Leone le encanta y le dice: "¡Sigue adelante!".
Improvisa una de las frases más famosas de Tuco, cuando es sorprendido en su baño por un viejo enemigo que tiene cuentas pendientes con él. Disparándole desde su bañera, se levanta y dice: "¡Cuando disparas, no cuentas la historia de tu vida!" (en versión original: “¡Cuando tengas que disparar, dispara! ¡No hables!”). El equipo detrás de cámara, incluido Sergio, se ahoga de risa.
Aquí está la secuencia otra vez...