Henry Cavill y Chad Stahelski trabajan en una nueva versión de una franquicia en la que solo hubo una película buena
Para muchos una de las mejores películas de fantasía de todos los tiempos, no hay duda de que Los inmortales, la cinta británica de acción y aventuras dirigida por Russell Mulcahy y protagonizada por Christopher Lambert, Sean Connery y Roxanne Hart, entre otros, es, como mínimo, un auténtico icono de los años 80 que se ganado un lugar inmortal, valga la redundancia, en la cultura pop.
Con un presupuesto de 19 millones de dólares y una recaudación que apenas llegó a los 13, el fracaso a nivel comercial de la película es un hecho, pero no tardaría en alcanzar el reconocimiento que se merecía, adquiriendo condición de película de culto y dando lugar a una franquicia de varias secuelas cinematográficas, series de televisión y también novelas, aunque ninguna llegase a ser objeto del mismo cariño.
"¡Sólo puede quedar uno!" ya es una de las frases más icónicas de la historia del cine y la película, con sus peleas con espadas, luces de neón y música de Queen transpira el espíritu puro de los años 80 por los cuatro costados.
En 1536, el líder del clan escocés Connor (Christopher Lambert) muere en el campo de batalla de las Tierras Altas de Escocia, pero, contra todo pronóstico, el hombre aparece vivo frente a sus seguidores a la mañana siguiente. Los aldeanos entonces sospechan que Connor está aliado con el diablo y lo ahuyentan, pero cinco años más tarde, el noble egipcio-español Ramírez (Sean Connery) le revela los secretos de los inmortales, una raza de guerreros inmortales condenados a batirse en duelo durante toda la eternidad y que ahora se ha convertido en la trágica realidad de Connor. Estos guerreros únicamente pueden morir decapitados por una espada y a manos de un igual y solo puede quedar uno, lo que traerá a la humanidad la felicidad eterna o la ruina total, dependiendo de quién prevalezca.
350 años después, Connor pasa desapercibido como el más común de los mortales bajo la identidad del anticuario Russell Nash. Sólo quedan cuatro inmortales, incluido el demoníaco y bárbaro moderno Kurgan (Clancy Brown), a quien Conner ya conoce de la Batalla de las Tierras Altas.
¿Puede realmente solo quedar uno?
Después de cinco secuelas mediocres y tres series de televisión no mucho mejores, la franquicia Los Inmortales podría, sin embargo, experimentar muy pronto un repunte cualitativo. El director de John Wick Chad Stahelski y la estrella de The Witcher Henry Cavill, han estado trabajando en una nueva película de Los Inmortales durante mucho tiempo y la combinación entre ambos talento resulta, cuando menos, bastante emocionante.
El proyecto, sin embargo, no pretende explícitamente ser una nueva versión del original de 1986, sino más bien una nueva película que (si tiene éxito) sentaría las bases para una nueva serie de películas. Y como reveló recientemente Henry Cavill, se dice que la acción de lucha con espada eclipsa todo lo visto antes: "Si creías que me habías visto usar la espada, no has visto nada".
Cavill adelantaba la pasada primavera además que habrá algunos cambios con respecto al material original. "Me encantan las películas originales, para bien o para mal, y es una de esas cosas que, cuando estaba leyendo el guion la primera vez, no estaba del todo seguro cómo iban a hacerlo", señaló el actor a CBM. "Pero, madre mía, profundizamos en estos personajes".