No contaba con engancharme a esta serie de Netflix, pero me ha dado algo que echaba en falta

Un fenómeno sorpresa

Cada vez elijo ser más cuidadoso con todos los fenómenos que van saliendo en una plataforma de streaming. Cuando una serie se alza de manera repentina en el número 1, acabo esperando a que pase un tiempo, quizás unas semanas, para ver si se sigue comentando la serie y realmente vale la pena más allá del éxito puntual.

Es por ello que tenía cierto recelo con Nadie quiere esto, una de las grandes sensaciones en la plataforma de Netflix, y hasta tenía dudas de que me fuese a enganchar. Pero al final me he visto todos los episodios, protagonizados por Kristen Bell y Adam Brody, con mucho gusto y hasta encontrando esa comedia romántica que hace tanto que no encuentro en cines.

Dos personas completamente diferentes se ven unidas por una gran conexión que no se puede ocultar. Ella es una presentadora de podcast totalmente desentendida de cuestiones de fe, que habla sobre temas de sexo y relaciones, y ha construido su vida sobre la libertad de pensamiento y exploración sin tabúes.

Él, por otro lado, es un rabino que se acaba de separar y se siente muy unido a su tradición y a su fe, lidiando con las tensiones de su vida espiritual y personal. Mientras su relación se intensifica, los dos se ven obligados a enfrentarse a sus propias creencias y a analizar el impacto que pueden tener sus diferencias en un futuro en común.

'Nadie quiere esto': una química inexplicable

Tomando parte de sus propias experiencias vitales y con las relaciones, Erin Foster da forma a una clásica historia de romance con malentendidos, conflictos pero también una pasión complicada de poner en palabras. Un encanto confortable, sin demasiadas complicaciones porque todos sabemos qué destino nos espera con estas historias.

La serie también confía mucho en que la química entre sus actores sea lo suficiente para tener involucrado al espectador en la historia. Por suerte, Bell y Brody están espléndidos juntos, creando momentos muy frescos y divertidos juntos que hace muy fácil comprar a los personajes. Es tan apacible que dan pocas ganas de ponerle peros.

Puedes ver Nadie quiere esto en Netflix.

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