Dragones y aventuras infantiles
por Virginia MontesEl éxito conseguido por la saga "Harry Potter" hizo que comenzaran a rescatarse otros bestsellers editoriales infantiles dedicados al género de las aventuras heroicas. Así, comenzaron a sucederse películas que intentaban captar a ese mismo tipo de público a partir del rescate de una serie de ganchos literarios convertidos en sucesos. De esta forma, llegaron películas como Las crónicas de Narnia o La brújula dorada, y también Eragon, la primera parte de una saga escrita por un precoz muchacho de nombre Christopher Paolini, que había configurado toda una mitología en la que lo sobrenatural, la magia y todo tipo de elementos fantásticos se daban la mano para construir un relato de aventuras tradicional.
La película intenta ser un reflejo de todo esto. Su tono está eminentemente enfocado al público infantil, lo que probablemente le perjudicó a la hora de ganarse a los adeptos, ya más entrados en el terreno de la adolescencia, de "Harry Potter". En cualquier caso, Eragon es una muestra más del poco ritmo narrativo y la escasa capacidad de sorpresa que ejercen los directores de este tipo de productos para imprimirles algo de personalidad. Viendo el resultado, no nos extraña que no se continuaran rodando las siguientes partes de la trilogía literaria.
A favor: Su inocencia.
En contra: Que no se sostiene por ningún lado, muy lejos de las películas infantiles del mismo tipo de los años ochenta.