Críticas
4,0
Muy buena
En tierra hostil

Una bomba, vamos

por Carlos Reviriego

El cine en torno a la invasión de Irak, al contrario de otros conflictos bélicos norteamericanos, aunque ha sido sustancioso (y hasta ha redefinido el estatuto de las imágenes, las formas y formatos en que se filma y se testimonia la guerra), no ha tenido una amplia repercusión en las taquillas. Ni siquiera la admirable 'Redacted', de Brian de Palma, o la engañosa 'En el valle de Elah', de Paul Haggis, lograron conectar con un público (norteamericano) que quizá prefería mirar a otro lado. La excepción fue 'En tierra hostil' de Kathryn Bigelow, que después de su premiere en Venecia y los halagos continuados de la crítica a lo largo de casi dos años, se impuso en una extraña gala de los Oscar al 'Avatar' de su exmarido James Cameron. El filme se desliza por los territorios del entretenimiento blockbuster y de la creación autoral con una astucia que le permite triunfar en ambos circuitos. Aunque más que una película sobre la guerra de Irak, se trata de una película sobre cualquier guerra, sobre las tensiones y pánicos experimenta el ser humano en un conflicto bélico. Rodada con profusión de cámara en mano, y estructurada en episodios (acercándose a los modos documentales), la historia sigue a la Compañía Bravo, una unidad de artificieros especialista en la detección y desactivación de explosivos.

A favor: La extraordinaria tensión que Bigelow convoca en la pantalla, colocando al espectador en la piel de los soldados.

En contra: Se echa de menos una presencia mayor del bando iraquí.