A media luz
por Paula Arantzazu RuizDe un tiempo a esta parte, la productora cinematográfica Walden ha recuperado producciones infantiles con personajes humanos, un hecho muy singular dada la actual dominación de la animación en el género infantil. De ‘Las crónicas de Narnia' o ‘Un puente hacia Therabitia' a esta ‘City Of Ember: En busca de la luz', todas ellas han copado el espacio que ha dejado la casa Disney, centrada ahora en exprimir al máximo la división Pixar. Esta adaptación de la novela de Jeanne Dupreau cuenta con tres grandes nombres de Hollywood (Martin Landau, Tim Robbins y Bill Murray) apoyando la historia de un grupo de adolescentes que luchan por encontrar la luz y mostrársela a los adultos, pues nuestros protagonistas viven en una ciudad subterránea. La metáfora con la que juega el cineasta Gil Kenan (‘Monster House', 2006) es tan obvia que duele hasta citarla (la cueva platónica llevada a los preceptos religiosos) y tampoco consigue que la película alce el suficiente vuelo como para abrumar a niños y adultos. Demasiado parroquiana.
A favor: Es una película anómala en el cine infantil contemporáneo.
En contra: El relato carece de tensión.