Cadáver exquisito
por Virginia MontesA pesar de ser conocido por producir películas eminentemente masculinas, lo cierto es que el director Luc Besson siempre suele poner en el centro de las películas que dirige a mujeres fuertes que se sitúan como las heroínas perfectas del cine de acción y aventuras que él siempre ha practicado. Desde Nikita a Juana de Arco, el francés siempre ha sentido predilección por las féminas de armas tomar, que no se amedrantan por nada y que son capaces de superar en astucia a los hombres que se les pongan por delante. Quizás por eso le sedujera la idea de adaptar los cómics de principios de los setenta de Jacques Tardi, protagonizados por Adèle Blanc-Sec, una exploradora y aventurera, liberal y decidida capaz de hacer resucitar a una momia o de incubar un huevo de dinosaurio.
Besson orquesta una película con un diseño de producción impecable, pero lamentablemente la narración carece de interés, así como las relaciones que se establecen entre los personajes, totalmente deslucidas. Tampoco funciona el humor ni su mezcla con el cartoon o el elemento fantástico. Es un cadáver exquisito. Tiene algo de encanto, sobre todo gracias a su actriz protagonista, pero por lo demás, es un envoltorio muy cuidado que nos regala únicamente estampas individuales preciosistas pero huecas.
A favor: Louis Bourgoin está espléndida.
En contra:Los elementos con los que se compone, no funcionan entre sí.