Cero en personalidad
por Cristina Álvarez LópezAlejandro Amenábar parece ser el gran representante del cine español a nivel internacional. Sin embargo, como director, Amenábar tiene poco de personal y su cine es más bien soso. Pese a ello, en algunos de sus filmes podemos experimentar un placer casi infantil viendo como copia y organiza sus referencias y viendo, también, los muchos fallos que presentan sus películas. Este es el caso de filmes como 'Tesis' (1996), 'Abre los ojos' (1997), 'Los otros' (2001) e, incluso, 'Nadie conoce a nadie' (1999).
No es el caso de 'Ágora', desde luego. En esta película todo lo estelar juega en contra de Amenábar. No solo se trata de uno de sus filmes más aburridos, sino que además todo queda sepultado bajo su apariencia fastuosa, bajo ese diseño de producción que ya no se erige en copia ni en "wanna be", sino que directamente ha borrado todo signo de personalidad introduciéndose de lleno en el aparato hollywoodiense.
A favor: Nada.
En contra: Los ridículos intertítulos.