Producto caducado
por Eulàlia IglesiasDisney perpetra una película al servicio de su producto televisivo más rentable en los últimos años, la cantante Hannah Montana. Para ello sacan provecho de la propia biografía de la actriz: el argumento se centra en la necesidad que siente la estrella de alejarse de Hollywood y recuperar sus raíces y el contacto con el mundo real. Así que Hannah regresa como Miley a su Tennessee natal con su padre (el cantante pseudocontry Billy Ray Cyrus) y empieza a flirtear con un amigo de la infancia que no tiene ni idea de su doble vida. Al tiempo que ayuda a su abuela en el intento de salvar al pueblo de las garras de una empresa inmobiliaria, organizando un concierto de su álter ego. La protagonista consigue despistar a todo el mundo respecto a su verdadera personalidad poniéndose y sacándose una peluca (sic)... Trufada de canciones y con un argumento propio de algún telefilm Disney añejo, la película solo es recomendable a fans irredentos del producto (ya caducado) que promociona.
A favor: Margo Martindale intentando aportar algo de dignidad como abuela.
En contra: El humor infantiolide, las canciones insoportables, la hipocresía de Disney, Miley Cyrus, Hannah Montana...