Van Damme contra los pantalones vaqueros
por Nestor HidalgoSi 'Double Team' (1997) no había sido ningún éxito a nivel crítico ni comercial, la siguiente colaboración entre el legendario Tsui Hark y Jean-Claude Van Damme no consiguió cambiar el desencuentro entre intenciones y resultados de un tipo de filmes que, dada su falta de pretensiones, tampoco suponían un descalabro para nadie e incluso podían dejar un relativo buen sabor de boca entre los fans del cine de acción y artes marciales. Desde luego, el siempre frenético desenfreno visual del director hongkonés de origen vietnamieta está a pleno rendimiento, por lo que el disfrute con sus anabolizadas formas cinematográficas está asegurado.
En vez del desastroso Dennis Rodman, en esta ocasión Van Damme está acompañado por el desastroso Rob Schneider en una decisión de cásting mucho más difícil de justificar que la de Lela Rochon como la chica de turno. La tiritante trama sobre una distribución internacional de explosivos camuflados en pantalones que el agente de la CIA Van Damme tiene que desarticular a patada limpia pertenece a uno de los guiones más deleznables de Steven E. de Souza ('Jungla de cristal'), por lo que lo más recomendable es hacer como Tsui Hark y despreocuparse de la historia, dejarse llevar por las formas cinematográficas aplicadas a la cinésica mamporrera de los músculos de Bruselas y disfrutar del espectáculo esquivando reparos.
A favor: El despliegue de recursos y composiciones expresivas de Tsui Hark.
En contra: El desastroso argumento y algunas decisiones visuales reprobables.