Críticas
2,0
Pasable
In time

Ladrones del tiempo

por Quim Casas

De estar un poco más elaborada en su fase de escritura, 'In Time' podría parecer un relato paralelo a aquellos escritos por Philip K. Dick sobre sociedades imperfectas y deshumanizadas de un futuro no tan lejano. El guión del filme, escrito por su propio director, Andrew Niccol, es colindante con los esqueletos argumentales de las historias de Dick llevadas al cine en 'Blade Runner', 'Desafío total', 'Minority Report' o 'Paycheck'. Pero se trata tan solo de una idea, de una buena idea que se agota muchísimo antes de que la película llegue a su fin. En este sentido, el problema principal de 'n Time' es el mismo que tienen las dos anteriores películas de ciencia-ficción de Niccol, 'Gattaca', sobre la selección genética, y 'Simone', en torno a la inteligencia artificial: el destello inicial de originalidad no es más que un relámpago cuya luz eléctrica tarda poco en extinguirse. Y no deja de resultar paradójico que esto le ocurra a Niccol cuando dirige sus guiones, ya que sus libretos rodados por otros –'El show de Truman', realizada por Peter Weir– si funcionan como una maquinaría perfecta de relojería.

Así las cosas, el retrato de una sociedad futura más que imperfecta que ofrece 'In Time', en la que el tiempo se ha convertido en la única moneda de cambio y los años, los días, las horas y los minutos se negocian constantemente mientras se prodigan las bandas que roban el tiempo y los magnates que trafican con él como oro en paño, queda superado rápidamente por una idea demasiado forzada de la acción vertiginosa –los protagonistas no paran de correr en todo el filme– y del thriller de ciencia-ficción sin enjundia alguna. La producción está supeditada también a la imagen que ofrecen su estelar pareja, Justin Timberlake y Amanda Seyfried, dos actores de moda, dos rostros cool, pero dos intérpretes de lo más discreto, convertidos en algo así como modernos Robin Hood, o Bonnie y Clyde del futuro, que sustraen años a los ricos para dárselos a los pobres. A ratos simpática, a ratos un tanto cargante en su estética superada de estilizadas gabardinas y trajes negros, 'In Time' entra bien al principio sin dejar ningún rastro distinguido después.

Lo mejor: el punto de partida inicial y el retrato de los ancianos burgueses que se mantienen físicamente jóvenes gracias al tráfico del tiempo.

Lo peor: la escasa entidad de su pareja protagonista y el giro del relato de ciencia-ficción al cine de acción neo-romántico.