Críticas
3,0
Entretenida
Rio 2

La familia (azul) crece

por Paula Arantzazu Ruiz

El guacamayo azul es una de las aves en serio peligro de extinción actualmente, pero en Río 2, la secuela sobre el torpe, pero valiente, Blu y su enamorada Perla, la familia crece. Y mucho. De nuevo con Carlos Saldanha a los mandos, regresamos a Brasil para ver que la pareja y sus tres pequeños polluelos ya son toda una gran familia, acostumbradísima al hábitat del parque natural Blue Bird, dirigido por Tulio y Linda, quienes, además, al comenzar la película descubren pistas que indican una posible colonia de guacamayos en la selva Amazónica. ¿Será cierto que finalmente Blu y su familia no son los únicos de su especie sobre la faz de la Tierra?

Con esta aventura para toda la familia los estudios Blue Sky buscan superar el mal sabor de boca que supuso el verano pasado la tibia acogida de Epic. El mundo secreto y lo cierto es que han apostado a caballo ganador. El relato de Río 2 quizá no es tan imaginativo ni alocado como el de su película predecesora, pero, por el contrario, el dibujo y el diseño de producción es espectacular. Hay más números musicales, siempre con el Carnaval carioca en el horizonte, y por tanto, más coreografías caleidoscópicas con las que quedarse embobado. Olvídense, eso sí, del espíritu Carlinhos Brown y de la locura new age à la Avatar (James Cameron, 2009): Saldanha sabe darle lustre al bello plumaje de sus criaturas tomando como referencia las espectaculares creaciones de Busby Berkeley y la energía, vitalidad y color de la que hacen gala los brasileños.

Río 2, además, ahonda en el mensaje ecologista propio de este tipo de producciones y, entre guiños a Shakespeare (la pérfida cacatúa Nigel también regresa para acechar a los protagonistas y su número musical versionando "I will survive" es sorprendente), Andrew Lloyd Weber o, ¿por qué no? Los padres de ella, la cinta intenta, por su parte, encandilar también a los mayores. Parece divertido y en ocasiones lo es y mucho, aunque Saldanha y su equipo no ganan por goleada: Río 2 es un trabajo algo rutinario en el que se ha tratado de cubrir carencias con excesos y extravagancias visuales. Demasiada samba.

A favor: Las caleidoscópicas coreografías de los pájaros y Nigel, la peor cacatúa del mundo.

En contra: No tiene el brío que su antecesora.