Ojo por ojo
por Rodolfo SánchezTras varios trabajos en su país, Inglaterra, sin demasiada relevancia, Roger Michell de repente se vio detrás de la cámara para rodar una de las comedias con más éxito de la época, coincidiendo con una suerte de renacer de la comedia británica en la que su película Notting Hill tuvo no poco que ver. Tras ella, Michell se desplazó a Estados Unidos, en donde cambió totalmente de tono y se adentró en el thriller con Al límite de la verdad.
En ella, el cineasta británico se adentra en una narración que intenta ir más allá del género para trazar una mirada con ciertos tintes de crítica hacia la sociedad del momento –la actual– mediante el duelo de hombres –Ben Affleck y Samuel L. Jackson– de diferentes clases sociales pero que, poco a poco, van introduciéndose en un carrusel de violencia y venganza. Michell logra crear en Al límite de la verdad una buen tensión y una buen atmósfera, si bien poco a poco la película va agotándose en sí misma aunque presenta una visión de la justicia –en toda su amplitud– bastante interesante. No obstante, podría decirse que se trata de la clásica película que resulta más relevante en su planteamiento que en su desarrollo; pero ya conocemos la excusa: concesiones comerciales.
A favor: El duelo entre Affleck y Jackson.
En contra: Que va perdiendo fuerza según va avanzando.