Críticas
3,0
Entretenida
Grand Canyon (El alma de la ciudad)

Vivir y morir en L.A.

por Nestor Hidalgo

En plena fiebre de películas sobre la vida de un grupo variado de personas desconocidas que viven en la misma ciudad y que, sin tener en principio relación, se van conectando o terminan confluyendo, el guionista y director Lawrence Kasdan presentó su propia aportación. Aunque queda un escalón por debajo de los grandes hitos de la tendencia, 'Vidas cruzadas' (Robert Altman, 1993) y 'Magnolia' (Paul Thomas Anderson, 1999), el cineasta demostró su experiencia anterior en el manejo de historias corales y repartos multitudinarios, como en 'Reencuentro' (1983). 'Grand Canyon' busca ser un retrato plural, interracial e interclasista de los ciudadanos de Los Ángeles y, a veces, el lirismo paternalista se va de mano.

Kevin Kline, Danny Glover, Mary McDonell y Tina Lifford destacan en el reparto, aunque el contenido y profundidad de sus historias dista de tener la misma profundidad. Digamos que Kasdan se encuentra más cómodo tratando los problemas conyugales y de mediana edad de un matrimonio blanco acomodado que intentando asumir la voz de otros. También es señalable el gusto del director por el hilo frágil de la existencia, haciendo ver la violencia del día a día escondida en casi cada esquina o acción despreocupada con asaltos, atracos, tiroteos, ¡hasta hay un terremoto! Aspecto ése mucho menos atrayente que la subtrama protagonizada por Steve Martin con un personaje inspirado en el superproductor de acción Joel Silver, que quizás habría merecido más espacio entre tanto drama y tremendismo.

A favor: Las piernas de Mary-Louise Parker y la barba de Steve Martin.

En contra: La ruptura de tono de las secuencias oníricas.