Una película de actrices
por Israel ParedesTras 'El jardín de la alegría', una divertida comedia interpretada por Brenda Blethyn, Nigel Cole dirigió 'Las chicas del calendario' que sigue, de alguna manera, la estela creada por 'Full Monty' dentro de la comedia británica: si en aquella un grupo de obreros decían convertirse en strippers, en esta un grupo de mujeres maduras pertenecientes al Instituto de la Mujer, deciden posar desnudas para el calendario que anualmente publica el instituto con el fin de recaudar fondos para luchar contra la leucemia. Pero a diferencia de aquella, en 'Las chicas del calendario' la idea de partida pierde frescura mediada la mitad de la película y tan solo queda el buen quehacer de las actrices protagonistas (con Helen Mirren y Julie Walters a la cabeza). Pero como es normal en el cine británico, ya sea comedia o drama, la solvencia de la realización se sobrepone a un guion que va perdiendo fuerza según avanza el metraje. Cole pone la cámara al servicio de sus actrices y deja que sean estas las que hagan todo el trabajo. Lo hacen y gracias a ellas 'Las chicas del calendario' tiene mayor interés.
A favor: Las actrices.
En contra: La paulatina pérdida de gracia de la historia.