Antología de la intolerancia
por Diana AlbizuMarcado desde su debut con 'Los chicos del barrio' (1991) como un cineasta con una gran preocupación por los temas raciales de la segregación, la intolerancia y la discriminación entre la juventud de EE UU, con 'Semillas de rencor', su tercer largometraje, John Singleton quiso elaborar su obra más ambiciosa y definitiva sobre el asunto. Con un reparto coral y una trama estructurada en torno a tres hilos narrativos interconectados en el campus de una universidad ficiticia, Singleton arma un mosaico generacional que pretende abarcar cuantos más temas de intenso candor social mejor: el racismo, la homofobia, el abuso sexual, las enfermedades venéreas, la violencia callejera, los tiroteos escolares, etc.
Malik (Omar Epps), Kristen (Kristy Swanson) y Remy (Michael Rapaport) son los tres personajes principales en torno a los que encontramos a una docena más que acaban relacionados en una madeja muy bien hilada, pero cuyos puntos de interés resulta fácil tildar de sensacionalistas, sobre todo cuando Singleton abandona la postura de gran narrador y adopta la de trilero amarillista. Pese a dicha tendencia manipuladora o algunos momentos de sonrojante coyuntura videoclipera, las esforzadas interpretaciones de todo el reparto y la primera hora de película, durante la que las distintas tramas todavía confluyen con una organicidad bien construida, defienden la existencia de 'Semillas de rencor' con dignidad dentro del ámbito de las películas 'didácticas' o propiciatorias de debate en institutos.
A favor: Los papeles secundarios de Ice Cube y Jennifer Connelly.
En contra: Una duración desmesurada y el trazo grueso racial.