Iban un terrorista irlandés, una terrorista vasca y un asesino a sueldo...
por Eulàlia IglesiasPoco tiene que ver este Chacal con la película de Fred Zinnemann que adaptaba el libro de Frederick Forsyth en la que dice basarse. Los responsables del film trasladan el centro de la acción de Europa a Estados Unidos y reducen el conflicto a un juego del gato y el ratón entre el asesino a sueldo de élite que encarna Bruce Willis y el terrorista irlandés con el rostro de Richard Gere al que acude el FBI para darle caza.
Si la película de 1973 integraba la trama en el turbulento contexto geopolítico de los sesenta, este 'Chacal' se apoya en una serie de estereotipos más propios de un film de James Bond: la militar rusa con la cara marcada que ayuda a los norteamericanos, el mafioso de Azerbayán y esa terrorista vasca retirada de nombre Isabella no contribuyen precisamente a darle consistencia y verosimilitud al film. Más que ante un potente thriller político nos hallamos ante un blockbuster de acción que se apoya en el carisma de sus dos protagonistas: un Bruce Willis jugando a ser el rey del disfraz y de los gadgets y un Richard Gere como improbable terrorista romántico y seductor al servicio del FBI.
A favor: El (poco explotado) sentido del humor de Chacal.
En contra: De todas las inconsistencias del film, nos resulta particularmente risible la de Mathilda May como presunta ex etarra.