Necedades digitales
por Nestor HidalgoAunque la primera 'xXX' dirigida en 2002 por Rob Cohen y protagonizada por Vin Diesel no pasara de ser un subproducto chusco y plagiario de las películas de acción y espionaje de James Bond, que no ocultaba en ningún momento el interés de montar su propia franquicia de agentes 007 cambiando los números por letras, no dejaba de tener su puñado (sin llegar a la media docena) de escenas de espectaculares y coreografías de acción competentes. Sin embargo, la obligatoria secuela renuncia siquiera a ese mínimo capital de interés y, sin contar con Cohen ni Vin Diesel (su personaje es eliminado en off mediante un diálogo; pura elegancia), termina por ser un catálogo de todo lo que puede llegar a molestar en el género de acción anfetamínica.
Una de las razones principales de la catástrofe se encuentra en la contrataciónd e Lee Tamahori, que venía de firmar 'Muere otro día', la película más taquillera de James Bond (ahí el motivo del fichaje) pero también una de las más aparatosas, ridículas y denigrantes entregas de la saga. Aquí consigue el mismo efecto, pero con el agravante de no contar con la mitología de un personaje carismático, sino con la fotocopia disuelta que ofrece un Ice Cube incapacitado y exclusivamente dedicado a soltar one-liners cual máquina expendendora. Sustituir la mayoritaria acción de especialistas de la primera entrega por un festín de efectos CGI delirantes y regidos por sus propias leyes físicas termina de evidenciar las diferencias entre una copia descarada con falta de imaginación y un completo desastre carbonizador de millones de dólares.
A favor: Su batacazo comercial acabó con las posibilidades de más entregas.
En contra: No sólo no vuelven Cohen ni Vin Diese de la primera, ¡Asia Argento tampoco!