Críticas
3,0
Entretenida
Ladykillers

Esta abuela es un peligro

por Miguel Blanco

El cine de los hermanos Coen siempre se construye sobre materiales previos, casi siempre asociados al cine. 'Muerte entre las flores' era un remedo de 'Cosecha roja' de Dashiell Hammett. 'El gran Lebowski' era un remake apócrifo de 'El sueño eterno' de Howard Hawks. 'El hombre que nunca estuvo allí' tenía como referente el cine negro de inspiración expresionista de los años 40. Y recientemente han realizado 'Valor de ley' adaptación de una novela ya llevada al cine por Henry Hathaway. Pero la única vez que han hecho una remake directo de otra película ha sido en esta 'Ladykillers', basada en la famosa comedia inglesa de Alexander MacKendrick.

La historia trata de una serie de ladrones que se preparan para dar el gran golpe de sus vidas, reunidos como inquilinos en la casa de una inocente y sacrificada abuelita que finalmente desencadenará involuntariamente sucesos fatales. La película original era una muestra elegante del famoso estilo de los estudios Ealing. Una película que respiraba humor inglés por los cuatro costados. Los Coen, cómo no, la llevan a su terreno y la convierten en una estrafalaria y a veces grosera comedia, donde la ancianita pasa a ser negra y los ladrones son el grupo de freaks habitual de las comedias de los hermanos. Si la película de MacKendrick se construía sobre la continuidad, la de los Coen es destructiva, llena de exabruptos y de cambios de tono, de partes que no terminan de unirse entre sí. Es, en el fondo, una comedia anticlimática. Es decir, una comedia de los hermanos Coen.

A favor: La galería de personajes caricaturescos a los que los Coen consiguen darles humanidad.

En contra: La sensación de que, pese a que la película funciona, un remake de 'El quinteto de la muerte' era innecesario.