Críticas
1,5
Mala
La feria de las vanidades

Codicia sin límites

por Covadonga G. Lahera

Drama de época ambientado en la Inglaterra del siglo XIX en un marco en el que el influjo de la India colonizada estaba muy presente entre la pomposa clase alta británica. La importación de sirvientes, amenizadores, acróbatas, instrumentos, comestibles... estaba a la orden del día y se empleaba como vehículo para alardear en las fiestas y banquetes privados. Así se contempla en una de sus secuencias tempranas cómo esta opulencia y exotismo oriental "reapropiado" es puesto en escena con impetuoso, pero forzado énfasis. En La feria de las vanidades, como en la novela homónima de W. Makepeace Thackeray, no faltarán las intrigas sentimentales que irán cruzándose en el relato.

Es esta adaptación de Mira Nair, fan del libro desde adolescente, un intento por retratar el ascenso de una muchacha huérfana, hija de un pobre pintor y una corista francesa, cuyos humildes orígenes no le impiden aspirar, ni luchar con todas sus fuerzas, por una vida en la que poder codearse con los de alta alcurnia. La realizadora de La boda del Monzón contó con un holgado presupuesto que se traduce en un notable diseño de producción y un reparto coral lleno de rostros conocidos (Reese Whiterspoon, Jim Broadbent, Gabriel Byrne, Bon Hoskins, J. Rhys Meyers...). Sin embargo, su capacidad narrativa resulta muy anodina en su desarrollo y bastante insustancial. El metraje se aletarga y cuesta llegar al final.

A favor: La secuencia de apertura, que opta por una presentación minimalista y sintética para relatar los orígenes de Becky.

En contra: Cero estimulante.