Críticas
3,0
Entretenida
Ojalá fuera cierto

Aquí fantasma, no me desconectes aún

por Covadonga G. Lahera

Comedia romántica correcta que suma con ligereza un elemento de procedencia fantástica al ser la médica protagonista, durante la mayor parte de su metraje, un fantasma que repentinamente toma conciencia de su inexistencia real y de que el cuerpo al que estaba conectada permanece en coma tras un accidente de tráfico. La popular actriz Reese Witherspoon, asociada a este perfil de películas sensibleras cuyo objetivo suele saldarse siempre con el satisfactorio encuentro del "alma gemela" (y fueron felices y comieron perdices...), tiene como compañero de reparto al atractivo Mark Ruffalo, que desde Mi vida sin mí ha interpretado ya unos cuantos roles de hombre sensible en vías de recuperación postraumática. En este filme de Mark Waters es un arquitecto que se ha especializado en paisajes naturales.

Ojalá fuera cierto, que adapta la primera novela del francés Marc Levy, remite a algunas otras cintas precedentes (como El cielo puede esperar), donde también se hablaba de segundas oportunidades, y por encima de todas ellas a Ghost (Más allá del amor), el éxito que en los noventa dirigiera Jerry Zucker, donde los personajes secundarios, por cierto, estaban mucho más trabajados que aquí, así como la puesta en escena de esa dimensión intermedia y transitoria entre la vida y la muerte, así como la comunicación entre los vivos y quienes han quedado atrapados en dicha franja. Ojalá fuera cierto discurre sin excesiva originalidad, pero tampoco se excede de modo indigesto con el azúcar. Su desenlace parece una versión reblandecida de La bella durmiente.

A favor: La presentación y giro inicial.

En contra: Sus lugares comunes y la poca entidad de los secundarios.