John Wick ha supuesto un antes y un después en el cine de acción de los últimos años. La saga adrenalítica no solo ayudó a Keanu Reeves a relanzar su carrera, sino que hizo popular un subgénero elegante, con escenas nítidamente coreografiadas y visualmente impactantes. Desde que vio la luz le han salido varias imitadores, como Kate, de Mary Elizabeth Winstead, o incluso Gunpowder Milkshake (cóctel explosivo). Pero, ¿quién mejor para expandir el género que el propio David Leitch, codirector de John Wick? Él mismo fue el que hizo Atómica, una joya protagonizada por Charlize Theron.
Antes de seguir, debes saber que Atómica ya no se encuentra disponible en ninguna plataforma de streaming, pero si bajo demanda en Movistar+, Prime Video y RakutenTV por 3,99 euros y 1,99 euros en la última mencionada.
¿De qué va 'Atómica'?
Atómica tiene lugar en Berlín Oriental, poco antes de la caída del Muro. Un oficial del MI6 aparece muerto y la lista con todos los nombres de los espías que siguen en activo en Berlín ha desaparecido. Lorraine Broughton (Charlize Theron), que también trabaja para el servicio secreto británico, llega a la capital de la RDA para recuperar la información confidencial.
La trama podría pertenece a cualquier cinta de espías y acción, pero Atómica tiene una personalidad muy especial. Es un thriller de espionaje, sí, pero huye de la estética gris que les suele caracterizar para abrazar una personalidad vibrante y muy fresca. Tiene una maravillosa banda sonora compuesta por éxitos de los 80, desde Depeche Mode hasta David Bowie y Lorraine va ligando las tristes calles de Berlín con luces de neón.
"Vomité cada día"
Una de las razones para ver la cinta es, sin duda, Charlize Theron. La actriz suele firmar un trabajo brillante en casi todo lo que hace, pero aquí, con su intacta melena rubia, aguanta estoicamente una acción que le supuso todo un reto. Si Keanu Reeves se dejó la piel en John Wick, Theron hizo lo mismo en su particular aventura. Y el mérito es todo suyo. La actriz se esforzó al máximo en esta producción.
"Tuve ocho entrenadores de pelea increíbles que básicamente me hicieron vomitar todos los días, y les estoy muy agradecida"
Y no fue la única consecuencia física que tuvo. Como desveló en una entrevista con EW, se rompió dos dientes al apretarlos durante el proceso. "Fui a cirugía justo antes de ir a Berlín para hacer esta película y todavía estoy lidiando con eso", agregó.
"Charlize hizo el 98 por ciento de sus dobles ella misma, todas las peleas, correr y todo eso. Solo cuando se trataba de que se cayera por un tramo de escaleras o se columpiara desde una gran altura, no podían hacerlo por razones de seguro", confesó el coodinador de acción, Sam Hargrave, a The Hollywood Reporter.
Esto le valió para rodar algunas de las escenas más espectaculares de acción del cine reciente. En concreto, una de las últimas secuencias de la película llama particularmente la atención. En una lucha dura y agotadora, Lorraine Broughton se abre paso a tiros a través de una escalera llena de enemigos, completamente exhausta y dedicada a una pelea interminable con un adversario igual de exhausto. Justo después se sube a un automóvil y lo persigue en una lluvia de balas, todo mientras el hombre al que se supone que debe ayudar escapa mientras se desangra lentamente.
Dura 10 minutos, lo que la hace una escena de acción larga y, por tanto, compleja. A esto hay que añadir que no se ve ningún corte a simple vista. El cineasta se ha preocupado lo suficiente como para afinar la edición -o el rodaje- y hacer que la secuencia parezca rodada a tiempo real. Toda una locura.