Shelley Duvall nunca conseguirá que la desliguemos de su gran interpretación en El Resplandor. La actriz vivió el gran momento de su carrera de la mano de Stanley Kubrick y, aunque firmó un gran papel, la razón de que siga presente en nuestra memoria tiene más que ver con la pesadilla que vivió detrás de las cámaras. No fue una buena experiencia para Duvall, pero, lamentablemente, no ha sido el peor momento de su vida.
La salud mental de Shelley Duvall ha estado siempre en debate. En un primer lugar, porque fue puesta a prueba por Kubrick. La intérprete pasó casi dos meses al límite, teniendo que llorar cada día -por exigencias del guion- y bajo las órdenes de un perfeccionista de la talla del cineasta.
[Kubrick] no graba nada hasta la toma 35. Después de un tiempo, tu cuerpo se rebela. Dice 'Deja de hacerme esto. No quiero llorar todos los días'. Y a veces solo ese pensamiento me hacía llorar. Pensaba: 'Oh no, no puedo'. Y, sin embargo, lo hice. No sé cómo", cuenta Duvall en una entrevista con THR en 2021
Anjelica Huston, que por aquel momento salía con Jack Nicholson, fue testigo de la presión que ejercieron sobre Duvall. "Lo pasó mal teniendo que lidiar con todo el contenido emocional de la película. Y no todos parecían ser muy simpáticos. Ella lo asumió. Creo que fue increíblemente valiente". Curiosamente, Kubrick fue uno de los que sí la apoyó, al contrario de lo que pudiera parecer. "Era muy cálido y amigable conmigo", asegura la propia Duvall.
Hay quien dice que lo mal que lo pasó fue lo que le hizo desaparecer de Hollywood, pero su exilio se produjo varias décadas después. Durante un tiempo triunfó con la serie Faerie Tale Theatre como creadora, productora y actriz. Se trata de un drama de fantasía antológico que se emitió entre 1982 y 1987. Está formado por 26 cuentos de hadas, cada uno independiente del otro, y ejemplifica muy bien de lo que Duvall era capaz. Después grabó Bajos fondos con Steven Soderbergh y fue después cuando decidió instalarse en Texas y huir de Hollywood. Allí vivió tranquilamente hasta que llegó una controversia no buscada.
El programa de Dr. Phil la humilló públicamente
En 2016, el programa El show del Dr. Phil, dedicado a ofrecer asesoramiento sobre 'estrategias de vida', acudió a Austin para dar con ella con el objetivo de "documentar la lucha y aportar recursos increíbles para cambiar su trayectoria", según declara un portavoz del programa. Lo que realmente hizo fue retratar a Duvall de manera negativa y desató las alarmas de sus seres más allegados. Lejos de concienciar acerca de la necesidad de atención a la salud mental, Dr. Phil creó un espectáculo a su alrededor.
Vivian Kubrick, hija del conocido director, fue una de las principales voces contra el programa. "Creo que se merece respeto. Estoy intentando recolectar tanto dinero como puedo", aseguró a The Hollywood Reporter, "Creo que más y más gente se da cuenta de lo brutal que es el sistema de Hollywood y cómo la gente no recibe cuidado de los estudios que se han beneficiado enormemente de su talento".
El programa concluyó en que Shelley Duvall se había negado a recibir tratamiento y que habían hablado con su madre para ayudarles a encontrar otro modo de ayudarla. Sin embargo, la actriz declaró a THR que su apoyo no fue bien recibido. "Descubrí el tipo de persona que [Dr. Phil] es por las malas. A mi madre tampoco le caía bien. Mucha gente, como Dan [Gilroy, su pareja], dijo: 'No deberías haber hecho eso, Shelley".
Su gran regreso 20 años después
20 años después de que desapareciera, Shelley Duvall regresa al cine en el género que mejor se le da: el terror. Deadline ha confirmado que la actriz tendrá un papel en la película The Forest Hills, del director Scott Goldberg. "Somos muy fans de El resplandor", cuenta el realizador, "Shelley contribuyó a que fuera una obra maestra absoluta al darlo todo y actuar de una manera que realmente mostraba el miedo y el horror de una madre aislada".