Si hay un personaje mítico que está recibiendo una enorme atención por parte de la industria cinematográfica en los últimos años ese es sin duda Pinocho, el protagonista de la famosa obra literaria del autor italiano Carlo Collodi al que muchos relacionamos directamente con la inolvidable película de Walt Disney estrenada en 1940, segundo largometraje del estudio tras Blancanieves y los 7 enanitos (1937). En 2022 se han estrenado dos películas que adaptan la historia de la archifamosa marioneta que se convierte en un niño de madera, pero es que no hace mucho, en 2020, se había estrenado también una bastante más aplaudida versión de Matteo Garron. Curiosamente, esta última versión estaba protagonizada por Roberto Benigni, que en 2002 había dirigido su apuesta personal para contar la mítica historia.
Con Pinocho en plena explosión, el debut en Netflix de Pinocho de Guillermo del Toro ha llegado con menos expectación de la que merecía, apenas tres meses después del estreno en Disney+ de la esperada versión de acción real del clásico de Disney. La Pinocho dirigida por Robert Zemeckis y protagonizada por Tom Hanks que vio la luz en la plataforma de 'streaming' de Disney el pasado mes de septiembre.
Sin embrago, a pesar de la sobredosis de Pinocho, el oscarizado cineasta Guillermo del Toro que este 2022 ya había arrasado en Netflix con su Gabinete de Curiosidades, una de las mejores series del año, ha conseguido superar la hazaña en la que sus predecesores habían ido fracasando uno detrás de otro: brindar una nueva versión del clásico cuento italiano a unos espectadores absolutamente familiarizados con la mítica marioneta fresca, original y capaz de aportar algo diferente.
Todo son elogios para Pinocho de Guillermo del Toro, que ya ocupa los primeros puestos de lo más popular en la plataforma de 'streaming' de la gran N y que está siendo objeto de un importante boca-oreja en redes sociales: puede que en los últimos tiempo haya habido muchas versiones de Pinocho, pero la de Del Toro merece la pena y posee, a diferentes niveles dentro de las diferencias entre los distintos proyectos, todo lo que le hubiéramos pedido a cualquiera de las anteriores.
Con una puntuación prácticamente perfecta en el portal de críticas Rotten Tomatoes, un 98% de la críticia especializada dedica sus mejores elogios a la cinta, que también está arrasando entre el público. En ella, Del Toro brinda una versión que comenzó a idear hace años pero que hasta ahora no había tenido la oportunidad de sacar adelante. Una vuelta de tuerca al clásico cuento en foma de musical de animación 'stop motion' que está dejando de una pieza a los espectadores por sus impresionantes efectos visuales, pero también por su versión más oscura de la historia.
"He querido hacer esta película desde que tengo memoria"
La primera vez que Guillermo del Toro habló de sus planes para Pinocho, allá por 2008, ya se refería a ella como una de las pasiones de su vida: "Ninguna forma de arte ha influido en mi vida y mi trabajo más que la animación, y ningún personaje en la historia ha tenido una conexión personal tan profunda conmigo como Pinocho", aseguró entonces. "He querido hacer esta película desde que tengo memoria".
Sin embargo, llevarlo a cabo no fue fácil y, aunque el proyecto comenzó a desarrollarse a principios de la década pasada, finalmente fue cancelado por la falta de presupuesto necesario para realizar lo que Del Toro tenía en mente y que él mismo estimaba en unos 35 millones de dólares.
Y entonces llegó Netflix, donde desde la semana pasada puedes ver una de las cintas que ya está entre lo mejorcito que ha estrenado la plataforma en el año que está a punto de terminar y que parece destinada a colarse a última hora entre los tops de mejores películas de 2022.
En ella conocerás la historia de un viejo conocido, Gepetto, un carpintero que vive solo y aislado en la Italia de la década de 1930, mientras el fascismo va cogiendo fuerza a su alrededor. En exte contexto, el solitario crear a un hijo de madera al que llama Pinocho y que una noche mágica cobra vida.