A mediados de los años 70 y comienzos de los 80 el cine italiano experimentó un hecho inédito hasta el momento. Tras décadas en reconstrucción de una industria mermada por las consecuencias de la Segunda Guerra Mundial, los productores volcaron todas sus energías en el cine de género, pero con una salvedad: en lugar de desarrollar subgéneros, se trataría de desarrollar productos basados en propiedades ajenas. Todo ello enfocado al mercado internacional, algo que se acrecentó con la llegada de los vídeos domésticos y la proliferación de los llamados en España: "cines de barrio". Una de aquellas películas, muy exitosa en las estanterías de los videoclubs nacionales -también gracias a su llamativa carátula- fue Apocalipsis caníbal.
Siempre con una vocación comercial, la industria italiana se había caracterizado por saber mirar de tú a tú a Hollywood con grandes peplums a comienzos de los 60 y gracias al llamado 'spaguetti western' que europeizó el género estrella estadounidense. Con una mirada a la taquilla internacional también nacieron los denominados 'giallos': relatos de suspense y asesinatos inspirados en la obra de Agatha Christie, Alfred Hitchcock y Edward Wallace. Estos filmes tenían un sello propio: eran mucho más explícitos y sangrientos que otros productos foráneos. Pero con los 70 ya asentados, estos tres géneros mencionados comenzaban a dar fuertes muestras de desgaste: el peplum ya no daba beneficios, el 'spaguetti western' había degenerado en productos bufos sin demasiado interés y el 'giallo' se había convertido en algo repetitivo y carente de creatividad. Mientras tanto, en Hollywood llega la era del 'blockbuster' con filmes que baten récords en taquilla. Viendo estos éxitos estadounidenses, los productores transalpinos comienzan a realizar sus copias de Star Wars (Star Crash), Tiburón (L'ultimo squalo) o Karate Kid (Karate Kimura), con el objetivo de reinventarse y hacerse un hueco en el mercado internacional.
Pero no sólo iba su empeño en plagiar descaradamente títulos que triunfaban internacionalmente. Sino que algunos guiones iban más allá y se traducían en pastiches de varios taquillazos de Hollywood. Aquí podemos nombrar obras como El visitante del más allá (1979), que era una mezcla entre La profecía (1976), La semilla del diablo (1968) y Encuentros en la tercera fase (1978). O también Terminator 2 (1990), que mezclaba las cintas de ciencia ficción Aliens (1986) y Terminator (1984). Este último filme dirigido por Bruno Mattei, responsable de otro de estos largometrajes 'frankenstein' que trata que trata de combinar otros grandes 'hits' con sello italiano como Holocausto caníbal (1980) y Zombi (1978): el ya citado Apocalipsis caníbal (también conocida como Virus, El infierno de los muertos vivientes o Hell of the Living Dead en inglés). Una coproducción española del año 1980 que está disponible en el catálogo de Amazon Prime Video.
Esta película de Prime Video es uno de los ‘slasher’ más gore que he visto: empalamientos, decapitaciones y sangre que tiñe la pantallaNacido en Roma en 1931, Bruno Mattei se convirtió en todo un referente de aquella industria de explotación italiana que copiaba y mezclaba 'blockbusters' sin ningún tipo de rubor. Comenzó realizando cintas eróticas en sus primeros tiempos tras las cámaras y en sus últimos años realizó varias películas en Filipinas (en las que llegó a plagiar, incluso, a uno de los 'popes' del cine de serie Z actual: Uwe Boll). Mattei contó con su amigo y guionista habitual Claudio Fragasso (perpetrador de la terrible Troll 2) para elaborar el libreto y con dinero español. Y es que, sí, Apocalipsis caníbal es una coproducción entre Italia y nuestro país. Lo más destacable de la película es la estupenda banda sonora compuesta por la formación Goblin, habitual del cine de Dario Argento en filmes como Rojo oscuro o Phenomena.
Apocalipsis caníbal arranca en una especie de central nuclear en Guinea donde unos científicos se encuentran realizando experimentos. Parece que algo falla en el proceso, así que dos de ellos se meten en las entrañas del lugar para saber qué ha sucedido. Allí encuentran a una rata muerta que vuelve a la vida y ataca a uno de los técnicos. Cuando sus compañeros se preocupan y acuden a la búsqueda de ambos, éstos -convertidos en muertos vivientes- les abordan y comienzan a devorar su carne. El filme nos traslada a Barcelona donde conocemos a un grupo de asalto (casualmente vestido igual que el de Zombi de George A. Romero) que trata de solventar una situación con rehenes. Este grupo es enviado a la central del comienzo del filme, porque nadie tiene noticias de ellos. Por otro lado tenemos a una joven periodista que viaja al lugar junto a su cámara. Allí se encuentran con una familia cuyo hijo pequeño ha sido mordido por algo… Cuando sus caminos se crucen, todos se tendrán que enfrentar no sólo a una horda de muertos vivientes, sino también a los peligros de la selva (incluyendo una tribu caníbal).
Al igual que hiciera el caradura de John Liu en Made in China -cuando grabó a los muertos de un accidente de avión y los metió en su película- Mattei utiliza imágenes de 'stock' de cadáveres reales y cuerpos canibalizados y las inserta a lo largo del metraje. Con lo que alguien que piensa que está viendo ficción, se topa con estas crudas escenas mientras ve Apocalipsis caníbal, lo que le valió no pocas críticas a su director. Además, como hiciera Ruggero Deodato en Holocausto caníbal, en el filme mueren algunos animales (debido a la ausencia de legislación ante este aspecto, por aquellos años). Cabe recalcar que, por aquella época, en Italia también estaba en auge el llamado género 'mondo' en el que algunas películas mostraban accidentes y muertes reales grabadas en vídeo; una tendencia iniciada con el filme Este perro mundo (1962) de Gualtiero Jacopetti, Paolo Cavara y Franco Prosperi. La fama de estos largometrajes -que inicialmente tenían una función antropológica- fue usada por realizadores que sólo buscaban el morbo, alcanzando su cúspide en la crudísima Faces of Death.
La peor película de artes marciales de la historia es española y se llama 'Made in China'Apocalipsis caníbal es una película que tuvo relativo éxito en los videoclubs de la época, debido a su gran cantidad de gore e imágenes explícitas. A pesar de sus paupérrimas actuaciones y su escasez de recursos es una cinta muy reivindicada en los foros de cine de serie B de comienzos del siglo. Si eres fan del "género zombi" y del cine de explotación de los 80, merece que le eches un vistazo si estás suscrito a la plataforma de 'streaming' de Amazon.