Desde que Tom Cruise iniciase la saga Misión imposible hace más de tres décadas, el actor en cada nueva entrega que ha ido protagonizando ha ido añadiendo un factor de riesgo aún más peligroso. Desde casi ahogarse practicando apnea hasta tirarse de una moto y hacer parapente, al intérprete no hay quien le pare (o sí).
Cuando Cruise está en un rodaje el equipo al completo se echa a temblar con las disparatadas ideas y propuestas que el actor lanza en cada nueva película a la que se enfrente. Al principio parecía ser solo en la saga Misión Imposible, pero ahora, la estrella de Hollywood ha extrapolado esta adicción a la adrenalina a otras películas que no son solo esta franquicia.
El último título en vivir en sus propias carnes las escenas límite de Cruse ha sido Top Gun: Maverick, la secuela de la cinta original de finales de los años 80 Top Gun. En ella, Cruise vuelve a dar vida a , un piloto que ahora se ha convertido en el instructor de la próxima élite del aire.
Pero más allá de parecer que el actor iba a quedarse atrás y ceder en su empeño de protagonizar él mismo todas las escenas de acción que se le pongan por delante, una vez más ha querido sumarse y ser el centro de todas las miradas. Pero, aunque parezca imposible, no siempre se le dice que sí a todo lo que Cruise pide. Durante el rodaje de la cinta, el protagonista pidió poder volar un avión F18.
El reproche a Tom Cruise que no ha pasado desapercibido en los Globos de Oro pero no ha estado allí para escucharPara que Cruise pudiera pilotar un F18, el equipo de la película debía pedir permiso a la Armada de Estados Unidos, a lo que esta respondió con un rotundo no. Solo el avión cuesta 70 millones de dólares, casi la mitad del presupuesto que se han gastado en hacer esta película: 170 millones de dólares.
Sin embargo, si has visto la película sabrás que el F18 aparece en diferentes escenas. Para ello, fueron propios pilotos de la Armada quienes los pilotaban. Lamentablemente, el actor se quedó sin ese gran capricho que, de haber salido mal podría haber arruinado la producción, pero, de haber tenido luz verde para hacerlo, habría sido un check más en la lista de cosas imposibles que hacer de Cruise.
Pero, no solo la Armada de Estados Unidos le negó uno de sus deseos, también le otorgó otros. Durante la película Cruise realiza una maniobra aérea que no estaba permitida y el equipo de producción tuvo que pedir permiso nuevamente a la Marina Armada del país para que pudiera hacerlo. En esta ocasión, el actor tuvo luz verde para volar a 15 metros sobre el suelo y a más de 900 kilómetros por hora.