No hay mayor hostión de realidad que este: tener que explicar a alguien mucho más joven que tú algo que estaba tan enquistado en ti y tu generación que ni hacía falta hablar de ello. En este caso concreto nos referimos a algo que nació como una anécdota y se convirtió en un dato tan conocido que perdió su estatus original. Pero, al igual que una curiosidad deja de serlo cuando toda una generación -en mi caso la mileniall- sabe de su existencia, vuelve a adquirir su adjetivo inicial cuando aparece una nueva camada de personas que eran demasiado pequeñas cuando tú estabas reteniendo tal información. Y todo eso te hace darte cuenta de algo: ya no eres tan joven como pensabas.
Me ha pasado hace muy poco. Estaba disfrutando de TikTok, que para mí es como vivir en un zapeo televisivo continuo, cuando me apareció un vídeo que hizo que el año de mi nacimiento pesase como una losa. Una usuaria estaba viendo María Antonieta en Netflix cuando unas Converse la pillaron por sorpresa. En la red social compartió su asombro por ver unas zapatillas que, por supuesto, no existían en el siglo XVIII. Y no es la única:
María Antonieta se estrenó en cines en 2007 -en Estados Unidos a finales de 2006-. Dirigida por Sofia Coppola y protagonizada por Kristen Dunst, la película, que cuenta la vida de la monarca durante los años previos a la Revolución Francesa, es una auténtica gominola visual y ganó el Oscar a Mejor diseño de vestuario. Los trajes, los zapatos, los peinados, los dulces, los decorados, la cubertería, los bailes… Todo en el filme hacía que quisieras formar parte de la nobleza francesa y tener la soberbia de responder con un “pues que coman tarta” a la advertencia de que tu pueblo no tenía ni para llevarse un mendrugo de pan a la boca.
Mira esta foto y no me digas que no quieres vivir en ella para poder agarrar un trozo de pastel con la mano como si fuera arena en la playa:
Sony Pictures
Si eres una de esas personas que gateaba cuando María Antonieta llegó a los cines y estás descubriendo ahora las Converse en el filme, aquí viene la explicación. Voy a compartir contigo lo que es un saber popular entre los de mi generación: No es un fallo. Esas zapatillas están ahí de forma intencional y fueron puestas por Roman Coppola, el hermano de la cineasta y director de la segunda unidad del filme. Él fue el encargado de colocarse detrás de las cámaras en el montaje con la canción ‘I Want Candy’ de fondo. ¿Por qué puso las Converse? Pues porque pensó que a su hermana le parecería divertido. Acertó y ahí se quedaron. Luego la gente le dio un significado a esta aparición: las zapatillas representan la juventud de María Antonieta. Mira, justamente lo que estoy perdiendo yo.
De todas formas, María Antonieta es una película que juega con los anacronismos. Sobre todo con la música, que no es propia del siglo XVIII. De esta forma, en el filme puedes escuchar canciones como ‘What Ever Happened?’ de The Strokes, ‘Ceremony’ de New Order, 'Plainsong' de The Cure y ‘Hong Kong Garden’ de Siouxsie and the Banshees.
Nunca unas Converse significaron tanto para una generación. Aquí me quedo yo, mirando esa imagen que me es tan conocida mientras acepto la realidad: que también habrá que explicar en algún momento las perdidas con el móvil, el sonido de la conexión a Internet y que la única forma de enseñar tus fotos era revelándolas en una tienda.
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