Jim Carrey es uno de los reyes de la comedia, pero hacer reír no siempre ha sido fácil. Una cosa es interpretar un personaje que provoque carcajadas entre el público y otra lo que el actor está sintiendo por dentro. Carrey lo pasó tan mal durante el rodaje de una de sus míticas comedias que la CIA tuvo que ayudarle: le entrenó para soportar torturas.
El intérprete protagonizó El Grinch en el año 2000. La comedia navideña de fantasía dirigida por Ron Howard puso a Carrey en la piel del cascarrabias ser de color verde que odia la Navidad. Pero el actor tenía que pasar muchas horas sentado en la silla de maquillaje para caracterizarse como su personaje y eso le superó.
Como confesó en el programa de la BBC The Graham Norton Show:
El maquillaje llevaba ocho horas y media. Era como ser enterrado vivo. El primer día volví a mi tráiler, atravesé la pared con la pierna y le dije al director Ron Howard que no podía hacer la película
El traje, los prostéticos, el maquillaje… Todo le provocaba claustrofobia al actor y para Howard y el productor del filme Brian Grazer eran muy malas noticias: podía significar la cancelación de la película. Y es que, de cara a hacer el filme, Audrey Geisel, la viuda de Dr. Seuss -creador del personaje- solo les había vendido los derechos para que la hiciera Carrey.
10 actores que sufrieron torturadoras sesiones de maquillaje"Teníamos que mantener el maquillaje y teníamos que mantener a Jim, pero teníamos que encontrar una forma de hacer posible que soportase algo que se parecía a ser torturado", afirmó Grazer en 2015.
Por lo tanto, si para Carrey dar vida al Grinch era una auténtica tortura, la solución podía ser entrenarle para soportarla. Y qué mejor que la CIA para ayudarle.
"Teníamos a un actor siendo prisionero de su traje, estaba siendo torturado por su maquillaje. ¿Quizá un especialista de la CIA podría enseñar a Jim Carrey a sobrevivir el maquillaje verde del Grinch de la misma forma que enseñaría a espías a sobrevivir un interrogatorio hostil?", se preguntó Grazer. El productor se puso entonces en contacto con un amigo de la CIA y comenzó el entrenamiento.
ENTRENAMIENTO DE LA CIA Y UN POCO DE AYUDA DE LOS BEE GEES
"Así que trajeron a un tío que entrenaba operativos de la CIA para soportar torturas. Así es como lo superé", explicó Carrey. El actor y el agente de la CIA se encerraron en una habitación todo un fin de semana y Carrey aprendió métodos que los agentes utilizan para controlar sus pensamientos, distraerse del dolor y la incomodidad y desarrollar la mentalidad necesaria para superar el pánico. El actor ha descrito esos días que pasó aprendiendo a soportar roturas como "divertidísimo".
Aunque el entrenamiento ayudó, no fue suficiente. Carrey también contó que la música de los Bee Gees le sirvió de ayuda durante el proceso de rodaje:
Lo único que funcionó para calmarme a través del proceso de maquillaje era todo lo que habían hecho. No sé por qué, pero los Bee Gees me hicieron feliz. ¡No habría Grinch sin ellos!
La combinación fue efectiva. Carrey siguió maquillándose a diario durante los 100 días que duró el rodaje de la película y, además, el filme fue un éxito. El Grinch recaudó más de 345 millones de dólares en todo el mundo y se convirtió en uno de los titulos más míticos para celebrar las Navidades en familia.
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