¿Qué haces cuando tu actor protagonista se lesiona y es imposible ocultarlo durante el rodaje de la película? Pues incorporarlo a la historia. Eso es lo que se vio obligado a hacer David Fincher durante la producción de uno de sus míticos 'thrillers'.
Seven, protagonizada por Morgan Freeman y Brad Pitt, ha pasado a la historia como una de las grandes películas de Fincher. La trama sigue a Mills y Somerset, dos detectives que investigan una serie de muertes conectadas con los siete pecados capitales. Aunque Seven es principalmente un drama de misterio y suspense, la película contiene momentos de acción. Rodando uno de ellos, Pitt se lesionó.
El accidente del actor de Érase una vez en... Hollywood tuvo lugar durante la grabación de la secuencia en la que Mills persigue al asesino por las lluviosas calles de Los Ángeles. Después de que el policía caiga por una escalera de incendios y se golpee contra el suelo, Mills lleva el brazo escayolado.
Esto no estaba en el guion, pero Fincher tuvo que introducirlo después de que el brazo de Pitt atravesara el parabrisas de un coche y se lesionara de gravedad. El accidente le cortó un tendón y tuvo que someterse a una cirugía en el brazo.
El equipo de Seven no quería paralizar el rodaje, pero la lesión provocó ciertas complicaciones. El filme no se rodó de forma cronológica, por lo que hubo que esconder el brazo de Pitt en escenas previas a la persecución.
Seven, estrenada en 1995, consiguió una nominación a los Oscar en la edición de los premios de la Academia de Cine de Hollywood celebrada en 1996. El filme pudo alzarse con el galardón a Mejor edición, pero se lo llevó Apollo 13. La película de Fincher fue bien recibida por la crítica y el público y fue el proyecto que hizo ganar popularidad al cineasta.
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