Hay películas, y esto lo digo desde el más absoluto respeto al espectador, que están hechas para nuestros mayores. Cintas de sabor clásico, con historias reales y con personajes reales, aventuras que mantienen intrigado, que son amables y tiernas y en las que no hay lugar para el sobresalto que acelere de más las pulsaciones. Sin duda, The Lost King es una de ellas.
En 2012, Philippa Langley, una madre y ama de casa de Edimburgo que descubre, nada más y nada menos, que los restos de Ricardo III de Inglaterra bajo un parking de Leicester, perdidos desde hacía más de cinco siglos. Pero no los encontró por fruto del azar. No. Philippa tuvo que luchar contra el escepticismo de una sociedad machista mientras investigaba el paradero del cuerpo.
En una pieza en exclusiva que nos acerca al ‘Cómo se hizo’ de esta The Lost King, el director, Stephen Frears, que tiene en su haber una película también muy 'de mayores' como es Philomena, comenta: “Esta señora dijo ‘El cuerpo está aquí’, y ‘aquí’ era un aparcamiento”. La actriz que da vida a Philippa, Sally Hawkins, (La forma del agua) ve a su personaje como el agua: una persona que jamás se rindió ante la adversidad de la sociedad británica.
Un hecho real contado en clave de comedia
Steve Coogan, (The Trip) que da vida a John Langley, esposo de Philippa, define a la película como “Un David contra Goliat, la historiadora aficionada contra el establishment”. “Es una de esas grandes historias que todo el mundo conoce por encima, pero no en profundidad, como la abordamos nosotros, declaran Dan Winch y Christine Langan, productores del largometraje. Y es que fueron bastantes los problemas por los que pasó Philippa para convencer a las altas esferas: “Tuvo que convencer, declara al respecto Frears, al ayuntamiento de Leicester para que la dejaran excavar”.
The Lost King no es la típica película del héroe pequeño frente al poderoso, ya que incluye elementos de fantasía. El propio Ricardo III, interpretado por Harry Lloyd, (Brave New World) hace acto de aparición en la misma: “Del guion, asevera Hawkins, me encantó el elemento de fantasía. Es una manera muy inteligente de enlazar pasado y presente. Me parece inteligente porque además es cómico”. Hawkins se refiere a las muy comunes conversaciones que entablan la protagonista y el monarca cuyo cuerpo está en paradero desconocido.
Una cinta que no desdeña el elemento cómico, generalmente ausente en las historias basadas en hechos reales, y que demuestra la gran vis cómica de su protagonista. “Sally ha hecho un trabajo extraordinario, tiene un don para la comedia” declara Jeff Pope, coguionista de la cinta.
Así que, ya sabéis, mayores y no tan mayores tenemos una cita con los hechos reales y la comedia en The Lost King. Seguro que os habéis quedado con las ganas de saber cómo esta ama de casa logró encontrar el cuerpo del monarca bajo un aparcamiento.