La filmografía de Alfred Hitchcock está plagada de obras maestras. Psicosis, Los pájaros, La ventana indiscreta... Grandes títulos de la historia del cine fueron firmados por él, pero no hay ninguno con la sublimidad casi mística que caracteriza a Vértigo (De entre los muertos), cuyo magnífico título en español ya nos avisa de que estamos ante algo grande.
Nadie pone en duda que esta cinta de 1958 destaca por su valor cinematográfico. Si preguntas a la crítica, todos estarán de acuerdo en señalarla como una de las mejores jamás realizadas. De hecho, desde 1995, está considerada por la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos como "cultural, histórica y estéticamente significativa", además de aparecer en decenas de clasificaciones. Todo el mundo sabe que es de lo mejor del séptimo arte, pero no es el primer título que se te viene a la cabeza al mencionar las mejores películas de la historia.
Fue considerada la mejor película de la historia y ahora tendrá un 'remake' con Robert Downey Jr. y el creador de 'Peaky Blinders'El Padrino, de Francis Ford Coppola, es la que suele encabezar la lista, seguida de la mítica cinta de Stanley Kubrick 2001: Una odisea del espacio o Ciudadano Kane, de Orson Welles. Todas ellas son más populares que la de Hitchcock, pero aquí podría comenzar un acalorado debate en torno a cuál es la mejor película que se ha hecho nunca que, muy probablemente, no tendría fin. Y lo cierto es que tampoco importa el resultado. En caso de que alguien no la haya visto aún, recomendamos encarecidamente dedicar unas horas de tu vida a descubrir Vértigo, la cual puedes disfrutar en Filmin.
Un romance aterrador cocinado a fuego lento
"Hay en Vértigo cierta lentitud, un ritmo contemplativo, que no se encuentra en sus otros films, a menudo construidos sobre la rapidez", decía François Truffaut sobre la película en el libro El cine según Hitchcock. Esta es una de las claves de que destaque sobre el resto de títulos. El cineasta aquí se permite el lujo de dar tiempo a las miradas entre los protagonistas, a enseñar el espacio y a dejar que los personajes se muevan frente al espectador.
El maestro del suspense sigue haciendo de las suyas en esta cinta, pero traslada la tensión a otros niveles. Ya no es algo que venga de fuera, sino que existe en el interior, en el miedo a la muerte y la lujuria indestructible. Una de las muchas maneras de calificar Vértigo es como una historia de amor trágica bloqueada por las obsesiones y gran parte de la fascinación que despierta viene de ahí. El director cuenta un romance deprimente y, en cierta manera, aterrador. La persecución inalcanzable del protagonista por conseguir a la mujer que cree amar tiene múltiples lecturas y hoy seguro que encontramos mucho más que decir que cuando fue estrenada.
La desaparición de James Stewart como Scottie
Hitchcock no era la persona más sociable del plató, pero sabía muy bien cómo trabajar con los actores para conseguir lo que quería. Le pidió a James Stewart, uno de los mayores actores estadounidenses de todos los tiempos, que desapareciera por completo detrás de su personaje hasta que la personalidad de estrella se hubiera evaporado por completo. El resultado es impresionante.
Stewart bordó la interpretación de Scottie, un hombre condenado al fracaso -traumatizado, sin poder seguir con su carrera como policía e incapaz de tener una relación- que se deja llevar por sus recuerdos hasta desaparecer por completo en el cuerpo de la persona que era.
'Vértigo', sobre el miedo a caer
Pero, ¿de qué va Vértigo? El eje de la historia es el policía John 'Scottie' Ferguson (James Stewart), quien sufre de acrofobia, es decir, miedo a las alturas. Después de una persecución por los tejados de San Francisco que termina con un compañero muerto, Scottie, traumatizado y lleno de culpa, decide renunciar a la policía. Cuando un antiguo compañero de clase (Tom Helmore) le pide a Scottie que siga a su esposa Madeleine (Kim Novak), él acepta el trabajo de mala gana. No tiene idea de a qué abismos espeluznantes lo llevará esto.
Vértigo recibió reacciones bastante moderadas de público y crítica cuando se estrenó en los cines. Hoy todo ha cambiado. Probablemente no haya otra película de Hitchcock que haya sido objeto de tantos debates académicos y que sea elogiada con tanta frecuencia como esta obra maestra.
Si quieres estar al día y recibir los estrenos en tu email, apúntate a la Newsletter de SensaCine